Antes de definir qué es un Trastorno de la personalidad es importante precisar ¿qué es la personalidad? Por décadas la psicología ha intentado contestar esta pregunta, entre ellos especialistas como: S. Freud, E. Erikson, G. Allport, A. Maslow y otros de la corriente Conductista, por nombrar algunos. Sus aportaciones, nos permiten concluir que la personalidad es el conjunto de características, patrones de pensamientos, sentimientos y conductas que nos hace a cado uno único; surge desde nuestro interior y permanece considerablemente consistente a lo largo de nuestras vidas.
Las teorías más actuales refieren que la personalidad se forma por una interacción entre nuestra biología y nuestro entorno, es decir, una combinación entre nuestra predisposición genética y estilos de crianza, factores socio-económicos, socio-culturales, etc.
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Ahora ¿qué es un Trastorno de la personalidad? Según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (en inglés Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders, DSM-V) de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría (en inglés American Psychiatric Association, o APA), consiste en un patrón persistente de experiencias internas y conductas que se desvían significativamente de las expectativas de la cultura del individuo que las exhibe.
Alteran significativamente el funcionamiento de sí mismo-self (identidad o auto-dirección) y las relaciones interpersonales (empatía o intimidad), percibiendo estos patrones como aceptables o imposibles de cambiar, a pesar de lo mucho que pueden llegar a afectar su día a día. En el 2007 se calculaba que la prevalencia de dichos era de un 9.1% a un 15% en la población general estadounidense. Algunos autores hablan de la presencia de uno en cada 11 personas, otros más actuales, calculan uno en cada siete, considerando que los problemas de personalidad son más frecuentes de lo que se había pensado..
La importancia de crear conciencia acerca de los Trastornos de personalidad ocurre ya que pese a los problemas que pueden llegar a ocasionarles a las personas que lo padecen, generalmente, no buscan ayuda repitiendo los mismos patrones disfuncionales, una y otra vez. Generalmente, cuando llegan a acudir es por una crisis personal importante o son llevados (obligados) por algún familiar o persona externa.
¿Cómo podemos diferenciar un “estilo” de personalidad de un Trastorno propiamente?, utilicemos un ejemplo: Fernando de 35 años, es muy seguro de sí mismo y carismático, también puede ser arrogante, manipulativo y mentiroso – aunque no ve nada de mal con dichas características ya que le son útiles para ganar sus casos y atraer a mujeres. Sin embargo, últimamente su “carácter” ha estado metiéndolo en problemas: comenzó a abusar de la cocaína, no puede resistir la tentación de ir a los casinos y “tables”. Además, ya se ha casado y divorciado dos veces, es infiel y pasa de una relación a otra.
Pese a que es exitoso en su profesión, su constante seducción hacia sus colegas lo pone en alto riesgo de perder su trabajo. Fernando finalmente se siente lo suficientemente motivado para visitar a un psicólogo quien le dice que tiene un Trastorno de la Personalidad “Antisocial”, deduciéndolo debido a la constante tendencia de poner sus propios intereses por encima de los demás. En este caso, es evidente como los rasgos antisociales prevalecen de manera evidente y determinante en su forma de ser, así como un Trastorno Narcisista no puede ver más allá de su propia grandiosidad o un Trastorno Obsesivo-Compulsivo no puede controlar su meticulosidad, necesidad por la perfección y exactitud.
Para los especialistas, una de las claves principales para emitir un diagnóstico es la inflexibilidad, mencionado que la mayoría de nosotros a veces estamos enojados y a veces somos amorosos, otras somos amables y otras mezquino, pero las personas con un Trastorno de la Personalidad se muestran igual una y otra vez, sin importar la situación.
Tipos de Trastornos de Personalidad
El DSM-V describe diez Trastornos de Personalidad, divididos en tres Clusters. Antes de describirlos, es importante mencionar que la mayoría de ellos son productos de la observación clínica, más que de estudios científicos en sí, por lo que pueden resultar vagos o imprecisos, siendo muy difícil que se presenten de manera pura, tal cual como vienen descritos. También, por esta misma complicación hay que acudir con un especialista de salud mental, en caso de sospechar la presencia de un Trastorno, evitando realizar un autodiagnóstico simplista y erróneo.
- Cluster A – Raros o excéntricos: se caracterizan por un patrón penetrante de cognición (por ej. sospecha), expresión (por ej. lenguaje raro) y relación con otros anormales ( por ej. aislamiento).
- Paranoide –
- Esquizoide –
- Esquizotípico –
- Cluster B – Dramáticos, emotivos o inestables: presentan un patrón constante de violación a las normas, comportamiento impulsivo, emotividad excesiva y sentimientos de grandiosidad. Además, tienden a la exteriorización de sus rasgos (acting out), llevado a rabietas, comportamiento auto-abusivo y arranques de rabia.
- Antisocial
- Límite (Borderline)
- Histriónico
- Narcisista
- Cluster C – Ansiosos o temerosos: tienen temores anormales y persistentes, incluso con respecto a las personas.
- Evitativo
- Dependiente
- Obsesivo-Compulsivo
Si bien los Trastornos de Personalidad pueden conllevar a muchos problemas en las relaciones interpersonales, afectando las áreas de trabajo, familia, etc. su gravedad puede verse disminuida a partir de su capacidad para implantarse dentro de contextos que se beneficien de su personalidad, disminuyendo su disfuncionalidad.
La realidad es que todos tenemos rasgos de personalidad que pueden crearnos problemas, sin embargo, para las personas con un Trastorno de Personalidad, como tal, los constantes conflictos son palpables. Si sientes que tú o algún ser querido se está viéndose seriamente limitado o afectado por las características mencionadas, visita a un experto de salud mental quien a partir de entrevistas y pruebas psicológicas puede definir la presencia de un Trastorno de la Personalidad.
Para tranquilidad de todos, los manejos son muy sencillos y con grandes resultados si se siguen las instrucciones de los especialistas en salud mental.