Pavo, pierna, lomo, ensalada de manzana, bacalao, pastas, postres de todo tipo son algunos de los platillos típicos de la Navidad y aunque no es lo correcto, muchas personas suelen comer mucho en esta fecha y hoy te diremos qué ejercicios hacer.
Si comiste mucho en Nochebuena y en Navidad y aún te sientes lleno o ya te llegó el arrepentimiento, hoy te diremos qué ejercicios hacer para sentirte mejor y combatir los síntomas de la indigestión.
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¿Qué ejercicios hacer después de haber comido mucho en Navidad?
Para nada es recomendado comer mucho en Navidad, pero si ya lo hiciste, tampoco debes culparte de más, ya que no puedes regresar el tiempo y no comer en exceso, pero lo que si puedes hacer son algunos ejercicios que te pueden hacer sentir mejor:
Caminar
Caminar ayuda a la digestión ya que favorece un mejor tránsito intestinal y por lo tanto, reduce las posibilidades del estreñimiento. Además, camiminar te ayuda a quemar las calorías que consumiste en Navidad.
Camina a tu ritmo y procura hacerlo al menos 30 minutos al día, después de haber comido mucho en Navidad, si puedes caminar por más minutos, esto te hará sentirte mejor.
Postura de la silla
Este tipo de sentadilla está diseñada para reducir la inflamación abdominal y otros síntomas propios de las molestias digestivas. Además de esto, tonifica las piernas y los glúteos. Lo único que tienes que hacer es ponerte firme con los pies separados a la anchura de las caderas. Después, flexiona un poco las rodillas y lleva la cadera hacia atrás como si quisieras sentarte en una silla. Mientras mantienes esta postura extiende ambos brazos sobre la cabeza y trata de mantener la posición durante un minuto. Inhala y exhala durante todo el ejercicio.
Mueve la zona abdominal
Otro ejercicio efectivo para mejorar la digestión es a través del movimiento abdominal. Lo primero que tienes que hacer es acostarte boca arriba con los brazos abiertos, los pies juntos y las rodillas dobladas. Una vez que estés en esta posición, deja caer las piernas a un costado al exhalar. Realiza una inhalación y vuelve a la posición inicial mientras exhalas. Repite el ejercicio del otro lado e intercala el movimiento las veces que sean necesarias para relajar los músculos de esta zona.
Para finalizar el ejercicio, lleva tus rodillas flexionadas hacia el abdomen, respira profundo varias veces y luego estira las piernas con calma para incorporarte poco a poco.
Sube y baja escaleras
Si te sigues sintiendo muy lleno después de la Navidad, lo que tienes que hacer es subir y bajar escaleras, procura hacerlo al menos por 30 minutos y verás como te sentirás más ligero.
Rodillas al pecho
Este ejercicio es una de las mejores actividades para tratar la inflamación abdominal y mejorar la digestión. Lo único que tienes que hacer es acostarte boca arriba sobre un tapete de ejercicio con las piernas extendidas y los brazos a los costados del cuerpo. Inhala y lleva las rodillas hacia el pecho con un movimiento lento, después, sostén ambas piernas con las manos y procura despegar el coxis del suelo. Asegúrate de mantener la espalda y los omóplatos apoyados el suelo, sin levantarlos.
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