Los pilates es una práctica deportiva ideal para la salud física y mental. Gracias a que los pilates no consisten en movimientos de alto impacto, es una opción ideal para aquellos que desean mantenerse activos y en forma, especialmente, después de los 40 años.
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El Cronista detalla que además de las modalidades tradicionales de pilates, como el reformer o el mat, surge una opción que aprovecha el soporte de la pared para garantizar una postura adecuada y trabajar el cuerpo de forma efectiva, sin comprometer la ejecución ni restar esfuerzo a grupos musculares específicos.
¿Qué son los pilates y por qué es recomendable hacerlos a los 40 años?
Vogue informa que los pilates se centran en ayudar al cuerpo a mantener una línea postural mediante la estabilización y el fortalecimiento del abdomen, es decir, el centro de gravedad (también conocido como core), que incluye músculos abdominales y lumbares, glúteos y suelo pélvico, encargados de sostener la columna vertebral durante el movimiento. Esto es beneficioso para las personas que desean cuidar su salud física y un buen momento es a partir de los 40 años.
El trabajo de estabilización de la pelvis que las personas hacen al hacer pilates permite mantener una posición neutra, lo que evita los dolores de espalda. Además, los ejercicios de pilates permiten optimizar la postura y el equilibrio, aumentar la eficacia de los movimientos que solemos hacer en la vida cotidiana y aliviar los dolores provocados por desequilibrios físicos, como el dolor de espalda, algo que puede resultar beneficioso a partir de los 40 años.
El ejercicio de pilates ideal a los 40 años para tonificar el abdomen
El portal Vitónica señala que uno de los ejercicios destacados dentro es la realización de sentadillas en la pared.
Los pilates de pared son cómodos y estables. Estos por lo general consisten en colocar los pies contra la pared para generar resistencia al tiempo que se realizan ejercicios específicos como la plancha, las sentadillas, los puentes, entre otros. La idea es usar la pared como soporte para las articulaciones y, al mismo tiempo, como resistencia para fortalecer los músculos.
Esta actividad también permite trabajar diversos grupos musculares, especialmente el abdomen, al tiempo que se fomenta el desarrollo de la masa muscular y la aceleración del metabolismo.
Para llevar a cabo este ejercicio tienes que posicionarte a unos pocos centímetros de la pared, de espaldas a ella, con los pies separados a la anchura de los hombros. Mantén los brazos a los costados y desciende hasta que los muslos estén paralelos al suelo, siempre apoyando completamente la espalda en la pared.
Desde esta posición, puedes mantenerte estático o agregar movimientos como giros de hombros o desplazamientos de glúteos hacia adelante y hacia atrás. También puedes incorporar peso para ejercitar los brazos.
Este ejercicio de pilates activa el metabolismo, quema calorías y mejora la postura corporal. Así mismo, su practicidad lo convierte en el ejercicio de pilates ideal para fortalecer el abdomen y acelerar el metabolismo, especialmente después de los 40 años.
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