¿Qué tal dormiste hoy? ¿Sientes qué dormiste bien y descansaste o te quedaste con sueño? Responder estas preguntas pueden influir directamente en tu estado de ánimo y a continuación, te decimos cómo.
La cantidad de sueño que necesitas dormir durante la noche depende de varios factores, especialmente de la edad. Aunque las necesidades de sueño varían significativamente entre individuos.
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Se sabe que los bebés duermen más y que los niños también necesitan dormir al menos 10 horas al día, mientras que los adultos necesitan dormir mínimo 7 horas diarias.
¿Cómo influye la percepción del sueño en el estado de ánimo?
Una investigación realizada por la Universidad de Warwick encontró que la forma en que las personas se sienten con respecto al sueño tiene un mayor impacto en su bienestar que lo que realmente durmió o lo que dice la tecnología respecto a la calidad del sueño.
Cabe la pena destacar que ahora con los relojes inteligentes muchas personas pueden medir las horas de sueño y cómo durmieron si mientras duermen por la noche lo llevan puesto.
¿Cómo se realizó la investigación?
Durante dos semanas, 100 participantes de entre 18 y 22 años llevaron un diario de sueño, documentando a qué hora se acostaron y se prepararon para dormirse, cuánto tiempo les tomó quedarse dormidos, a qué hora se despertaron, a qué hora se levantaron. de la cama, y cuán satisfechos estaban con su sueño en general.
También se pidió a los participantes que calificaran sus emociones positivas y negativas y cuán satisfechos estaban con sus vidas al día siguiente. A lo largo del estudio, también usaron un actígrafo en la muñeca para medir su movimiento, patrones de sueño y ciclos de descanso.
Los investigadores compararon los datos del actígrafo con las percepciones de los participantes sobre su sueño para descubrir cómo la calidad del sueño se relacionaba con su estado de ánimo y satisfacción con la vida al día siguiente.
“Nuestros resultados encontraron que la forma en que los jóvenes evaluaban su propio sueño se vinculaba constantemente con cómo se sentían acerca de su bienestar y satisfacción con la vida”, dijo doctora Anita Lenneis, autora principal del estudio.
Cuando los participantes informaron que durmieron mejor de lo normal, experimentaron emociones más positivas y tuvieron una mayor sensación de satisfacción con la vida al día siguiente.
"Sin embargo, la medida de la calidad del sueño derivada de la actigrafía, que se denomina eficiencia del sueño, no se asoció en absoluto con el bienestar del día siguiente", dijo Lenneis.
En resumen, el estudio muestra que su percepción de la calidad del sueño es más importante para el estado de ánimo y el bienestar que lo que dicen sus dispositivos para dormir.
Un dispositivo de seguimiento del sueño puede decir que has dormido mal, pero si tu percepción de lo bien que has dormido es positiva, es posible que estés de mejor humor ese día.
(Con información de: Mayo Clinic y Healthline)