Tenemos que anunciar con gran pesar que este lunes 15 de enero es el día más triste del año. La clave para detectarlo es sencilla: se trata del tercer lunes de cada año. A nivel mundial se le conoce como “Blue Monday” y hay varios factores que se tomaron en cuenta en la ecuación para considerar el momento más sombrío en cada inicio de ciclo:
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- La estación invernal: la disminución en la exposición a horas de luz produce un cambio en el patrón de secreción y de receptores para los principales neurotransmisores de características antidepresivas (la serotonina, noradrenalina y dopamina), poniéndonos más frágiles afectivamente.
- Es el momento en que nos vemos más agobiados por el regreso a la rutina cotidiana después del receso de fin de año que estuvo lleno de eventos extraordinarios y muchas, muchas fiestas.
- Extrañamos en demasía a la familia y a los amigos que vimos intensamente en las vacaciones, nos llenamos de reuniones con ellos, con gran interacción, muchos regalos y un ambiente de felicidad.
- Nos comienzan a llegar los reportes de los gastos fuera de lo común que hicimos durante el mes de diciembre, más específicamente los estados de cuenta de las tarjetas, y prácticamente la primera quincena del año ya nos la acabamos, mejor conocida como la famosa “Cuesta de Enero”.
- Vemos hacia adelante en el año y se nos hace interminable el recorrido de la cantidad de pendientes y compromisos que nos restan por cumplir. Es justo el momento en que si, queremos conseguir los objetivos planteados, ya no nos alcanzan solamente las ganas y tenemos que ponernos a trabajar en planes organizados y priorizados para conseguirlos. Más claramente, es el punto clave de fracaso en los propósitos de inicio de año.
Lo que debes tener en cuenta este Blue Monday
Así es, cada tercer lunes de enero, sufrimos de esta tristeza abrumadora. Con todos los elementos que vimos arriba, el psicólogo Cliff Arnall y su equipo de actuarios, a principios de los años 2000 elaboró una fórmula que le daba peso a cada uno de ellos a través del tiempo del año con la finalidad de determinar cuál era el momento en que los seres humanos nos sentíamos más sensibles, frustrados y con el ánimo más bajo.
Hay que ser claros que todo este esfuerzo de cálculos estadísticos fue financiado por un conglomerado de agencias de viajes británicas que tenían como objetivo descubrir este clímax de sentimientos depresivos bajo el constructo de que es el momento exacto donde los seres humanos somos más susceptibles a buscar soluciones mágicas para este malestar.
Es por eso que el día donde las compañías de viajes y de regalos que no nos compramos todos los días aprovechan y nos envían una serie de ofertas especiales donde podemos ser presas fáciles de comprar la clave que resuelva nuestros pesares, sobre todo de forma impulsiva.
El consejo es fácil de enunciar, pero difícil de vivir este lunes… esta sensación pasará, seguro pasará… sólo tenemos que dejar pasar el tiempo. Así que paciencia hasta que se nos pase la tristeza y a seguir cumpliendo los compromisos y metas de este año.
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