La cúrcuma es un condimento muy popular actualmente y proviene de la planta de la India Oriental que pertenece a la familia del jengibre. Se usa principalmente como especia y colorante alimentario, pero también como aliado para bajar el colesterol. Así debes tomarlo para disfrutar de los beneficios.
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De acuerdo con un artículo de Medical News Today, el ingrediente activo que le da propiedades medicinales a la cúrcuma se llama curcumina y en muchos lugares es parte de la medicina tradicional, especialmente para tratar la inflamación y hasta el dolor crónico.
Pero las propiedades de este condimento también podrían beneficiar al corazón, ya que su consumo puede reducir el colesterol y con ello, disminuir el riesgo de infarto y otras complicaciones cardiovasculares.
Así que toma nota para saber cómo consumir la cúrcuma y disminuir de forma natural el colesterol, claro, complementando con un estilo de vida saludable que incluya ejercicio y el consumo de suficientes frutas y verduras.
Cúrcuma para bajar el colesterol ¿Cómo consumirlo?
La cúrcuma se caracteriza por su color amarillo o naranja y un sabor picante que puede complementar muchos platillos y hasta bebidas, como la famosa leche dorada. Sin embargo, lo que más destaca es su contenido de curcumina, que de acuerdo con la Harvard Health Publishing, tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que protegen al cerebro y al corazón.
Además, se ha comprobado que la cúrcuma puede aportar varios beneficios a la salud por su contenido de fibra, proteínas, vitaminas C, E y K, así como calcio, potasio, hierro, zinc y magnesio, detalla una publicación de Clarín.
QuirónSalud destaca que la cúrcuma posee efectos antiinflamatorios y antioxidantes, que permiten disminuir el colesterol malo o LDL, así como los triglicéridos, grasas que pueden acumularse en las arterias hasta obstruirlas y cuyo primer síntoma puede ser un infarto.
Mayo Clinic señala que entre los principales factores para desarrollar colesterol malo se encuentran la falta de ejercicio, la obesidad, tabaquismo, consumo de alcohol, una dieta poco saludable alta en grasas y azúcares, así como factores genéticos en algunos casos.
El riesgo radica en que el colesterol puede formar depósitos en las paredes de las arterias, lo que médicamente se conoce como ateroesclerosis, lo que puede reducir el flujo sanguíneo y provocar complicaciones como dolor en el pecho, accidente cerebrovascular y ataque cardiaco.
La cúrcuma puede ser un aliado contra el colesterol malo o LDL y para ello, debes consumirlo de forma frecuente y lo mejor es que puedes hacerlo de diferentes maneras, como:
- En infusiones o tés
- En ensaladas y sopas al agregarlo como especia
- Directamente en trozo y masticado
- En polvo en un licuado o batido con ingredientes saludables como fruta fresca y avena
- En cápsulas, siempre consultando antes al médico
A pesar de que la cúrcuma puede tener muchos beneficios para controlar el colesterol, es importante que lo tomes con precaución y sin excederte, ya que en algunos casos puede causar malestar estomacal por su sabor picante y debido a que favorece mayor producción de ácido gástrico.
En algunos casos también puede adelgazar la sangre, haciendo que ante una lesión, el sangrado ocurra con mayor facilidad, aunque no está claro todavía por qué sucede esto, aunque se cree que puede ser por su influencia en la reducción de la presión arterial y del colesterol. Si tomas anticoagulantes, será mejor que evites la cúrcuma.
En caso de embarazo o lactancia, no tomes la cúrcuma a menos que un médico lo autorice y te indique la dosis adecuada.
Otros beneficios de la cúrcuma
Consumir regularmente cúrcuma puede beneficiar muchos aspectos de la salud, principalmente por su efecto antiinflamatorio, que se ha visto que puede reducir el dolor y la inflamación en caso de enfermedades reumáticas, asegura la Arthritis Foundation.
También puede controlar el dolor por distintos padecimientos, incluyendo el cáncer, así como proteger al hígado del daño debido a sus antioxidantes, aunque se debe consultar al médico antes de tomarlo en caso de ya consumir medicamentos para evitar interferencias.
Finalmente, en dosis adecuadas, la cúrcuma puede mejorar la digestión, reduciendo la inflamación y mejorando el tránsito intestinal. Al respecto, un estudio publicado en la revista BMJ Evidence-Based Medicine, encontró que la cúrcuma podría ser de utilidad para combatir la indigestión (dispepsia) y que podría tener la misma eficacia para tratar la indigestión que el omeprazol.