Para Jessie Inchauspé las dietas no son la mejor opción cuando se trata de mejorar tu salud y bajar de peso, incluso señala que está peleada con la obsesión de medir la calorías, acción que suele ser infundada cuando las personas se someten a una dieta.
En el bestseller “La revolución de la glucosa”, la escritora enseña a través de consejos fáciles a mejorar la salud física y mental. Las mediciones de sus niveles de glucosa y su relación con los alimentos que ingería fueron publicados en la cuenta de Instagram GlucoseGoddess, de la cual Jessie Inchauspé es la fundadora y la describe como un movimiento que está ayudando a la gente a reconectar con su cuerpo.
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Jessie Inchauspé es matemática por el King 's College, en Londres, y tiene un máster en Bioquímica por la Universidad de Georgetown. A los 19 años su vida cambió radicalmente tras un accidente, se rompió la espalda al saltar de una cascada en Maui. "Una de mis vértebras explotó en 13 pedazos", explica la escritora.
La especialista en bioquímica trabajó también en una start-up de análisis genético en Silicon Valley y su paso por ese proyecto le hizo darse cuenta del poder de los hábitos alimentarios. Ella fue parte de un programa que medía los niveles de glucosa en su cuerpo, a raíz de esas mediciones se enfocó en estudiar el efecto de la comida en nuestra salud.
Reconciliarse con la comida y evitar las dietas
Inchauspé asegura que los niveles de glucosa juegan un papel primordial en todos los aspectos de nuestra vida y esto está vinculado con otros aspectos de salud que van desde los antojos hasta la fertilidad, así como el estado de nuestra piel y cabello, por mencionar algunos.
La experta destaca que para tener un buen estado de salud y mantener los niveles de glucosa dentro de los estándares recomendados no es necesario prohibir alimentos ni hacer dietas, sino tomar mejores decisiones alimenticias que ayuden a llevar una mejor relación con la comida y con nuestro cuerpo.
“Mi intención no es decir nunca más vuelvas a comer azúcar porque eso no es realista, si no se trata de enseñar cómo y cuándo tomarla de manera que sea menos dañina para el cuerpo y quiero que la gente se reconcilie con la comida que ya no tenga miedo”, explica en entrevista con Sumédico la especialista en bioquímica.
“No recomiendo que se sometan a la cantidad de calorías que consumimos, ni a las dietas, mi pasión justamente es enseñar a la gente esa ciencia tomar todos esos estudios científicos y convertirlo en lo más didáctico posible. Es decir traducir toda esa ciencia en tips cortos y aplicables para que la gente pueda usar esos tips”, señala.
10 tips para evitar picos de glucosa
“La revolución de la glucosa” es un libro que se centra en cómo evitar los picos de glucosa después de comer y lograr una curva sostenida, esto claro, siempre dentro de los rangos deseados. Algunos de los consejos son:
- Come los alimentos en el orden correcto, en este punto la autora sugiere que el orden de los factores incide en la velocidad de absorción de la glucosa y por eso se debe empezar por los alimentos naturales, por ejemplo verduras y que no contengan azúcar, en el libro se hace énfasis en que jamás se debe empezar el día ingiriendo líquidos dulces.
- Añade siempre vegetales, hojas verdes, verduras y fibras a todas tus comidas.
- Deja de contar calorías.
- De todas nuestras comidas, es el desayuno en el que hay que cuidar más la curva postprandial (pico de glucosa tras las comidas), este momento de alimentación debe incluir fibras vegetales, grasa y proteínas así como fibras vegetales. Además evitar los carbohidratos simples (zumos, panes, panqueques, jugos, etc.).
- Cualquier tipo de azúcar es igual (sucralosa, aspartamo, stevia, miel de agave o lo que sea) en fisiología nuestra lengua no distingue y nos va a provocar un pico de insulina, por lo que se debe elegir una que se adecue a las necesidades de cada uno y que no te eleve la glucosa
- Si tienes un craving (antojo), come algo, pero no algo dulce y que no lleve carbohidratos simples.
- Consume vinagre para evitar picos de glucosa.
- Después de comer, ¡muévete! No te quedes sentado.
- Si vas a picar algo (comer entre comidas) que sea algo salado en vez de dulce. Elige vegetales con dips. (zanahoria, brócoli, apio, etc)
- Nunca comas carbohidratos solos. Mézclalos con vegetales, grasas, proteínas, etc.
Jessie Inchauspé recomienda que las personas lean detalladamente los 10 tips que se incluyen en su libro y que elijan empezar con el que les parezca más sencillo, para ella uno de los más poderosos es cambiar el desayuno de dulce a salado, ya que con ello se puede estabilizar los niveles de glucosa durante el resto del día.
"La ciencia nos dice que lo primero es consumir verduras. Luego proteínas, después grasas y al final carbohidratos y yo sugiero traducir eso en empezar con las verduras, por ejemplo, eso es más sencillo, porque todo está abierto a interpretación y se trata de usar los que los que les sea más fácil en la vida de cada quien", explica Jessie Inchauspé.
La salud mental para Jessie Inchauspé es un tema complejo donde lo que comemos influye en el estado de ánimo y explica que existen diversos estudios que han demostrado que a mayor glucosa, hay más síntomas de depresión, de ansiedad y mayor variabilidad en el humor.
“Entonces puedes estar más irritable, la razón es que los picos de glucosa inflaman el cerebro y por lo tanto la velocidad de las señales neuronales es menor y se produce también menos tirosina en el cerebro, que es una hormona que impacta también en el humor, en sentirse más triste, más deprimido", detalla la especialista.
Comer o no dulce ¿he ahí el dilema?
De manera popular se tiene la idea de que la ingesta de glucosa en forma de dulces o refresco nos va a elevar la energía. Si bien la glucosa expresada en forma de azúcar es la fuente de energía favorita para nuestro cuerpo, tendemos a pensar que si comemos mucha azúcar tendremos mucha energía, pero no es tan sencillo.
Para explicar lo que el consumo de azúcar provoca en nuestro cuerpo en grandes cantidades y en un sólo alimento, como el caso de las golosinas, Jessie Inchauspé hace una analogía: “Es como tener una planta en casa que necesita agua para poder crecer y sobrevivir, pero si le pones demasiada agua, pues se ahoga y se muere”.
La especialista en bioquímica agrega que en el cuerpo humano es lo mismo, ya que un poco de glucosa está bien, pero si es en exceso empiezan los problemas.
“Lo principal es que la mitocondria, que es el órgano celular que se encarga de producir energía, cuando recibe demasiada glucosa se estresa y ya no produce energía de manera efectiva. La consecuencia de comer mucha azúcar es que estamos agotados y la fatiga es el síntoma más común junto con los antojos, pero esto depende de cada persona y del estado de su salud", afirma la experta.
Jessie Inchauspé concluye que existe una correlación entre los picos de azúcar en sangre y el estado de ánimo, por ello reconciliarnos con lo que comemos nos puede cambiar la vida, los 10 consejos para ella sólo son principios para mejorar nuestra alimentación y de ninguna manera son una dieta rígida.