¿Te ha pasado que no puedes dormir por las noches por sobrepensar demasiado? Existen muchos trastornos del sueño por los que puedes llegar a presentar insomnio y la rumiación de nocturna o pensamientos intrusivos pueden ser uno de ellos.
En psicología se conoce a los pensamientos rumiantes o intrusivos como aquellos que tenemos de forma continua y de los que nos cuesta desprendernos, detalla Psicoactiva. Pueden llegar de forma repentina y suelen ser pensamientos que nos provocan estrés o ansiedad sobre hechos pasados o que incluso nunca han pasado.
Te podría interesar
Según la psicóloga clínica y especialista en trastornos del sueño, Lisa Strauss, pensar excesivamente por las noches puede ser un signo de inseguridad, estrés, ansiedad, trastorno obsesivo compulsivo, déficit de atención, entre otros, indica La Tercera.
Pese a que estos pensamientos pueden llegar a ser intensos o molestos, pues no nos dejan conciliar el sueño, existen algunas estrategias para dejar de pensar demasiado por las noches y lograr tener un sueño reparador. Te contamos de cuáles se tratan.
Estrategias para dormir
- Utiliza un distractor que te calme
De acuerdo con la experta Strauss, la mente humana no puede no puede entretenerse con dos narrativas al mismo tiempo, por lo que es buena idea escuchar audiolibros, podcast o programas de radio relajantes con luz tenue o nula antes de dormir. Hacer esto te ayudará a concentrarte en lo que escuchas y logres conciliar el sueño poco a poco.
- Analiza los sentimientos que sueles ignorar
Los sentimientos enterrados por la noche pueden volver en forma de angustia y pensamientos excesivos, por eso la experta propone conectar con ellos a lo largo del día y tratar de entender por qué nos sentimos como nos sentimos o de dónde viene nuestra angustia constante.
- Cambia el foco de atención
Suele pasar que por las noches no contamos con distracciones y podemos echar a volar nuestra imaginación y pensamientos, algo que no siempre es bueno si tendemos a sobrepensar en las cosas negativas que nos provocan estrés más que en las positivas de nuestra vida.
Debido a esto, es importante buscar pensamientos alternativos que nos agraden. Por ejemplo, puedes pensar en planificar una salida agradable, y divertida con amigos; si te gustan las manualidades podrías pensar en qué manualidad sería creativa y entretenida para ti. Si te gusta escribir puedes intentar pensar en una historia, entre otras cosas.
(Con información de La tercera, Psicoactiva, PsicologíayMente).