ESTRÉS CRÓNICO

Estrés crónico y depresión aumentan hasta 4 veces las probabilidades de padecer Alzheimer

Un estudio detalla la relación entre el estrés crónico, la depresión y el deterioro cognitivo

¿Qué factores aumentan las posibilidades de padecer Alzheimer? Esto dice un estudio.
¿Qué factores aumentan las posibilidades de padecer Alzheimer? Esto dice un estudio.Créditos: Canva
Escrito en MENTE SANA el

Personas con estrés crónico y depresión al mismo tiempo tienen más probabilidades de ser diagnosticadas con deterioro cognitivo leve o Alzheimer. A esta conclusión llegan investigadores del Instituto de Karolinska (Suecia) en su nuevo estudio publicado en la revista ‘Alzheimer’s Research & Therapy’ donde participaron personas entre 18 a 65 años. El riesgo fue 4 veces mayor a comparación de quienes no tenían ninguna de estas dos afecciones, reporta Infosalus.

“El riesgo sigue siendo muy pequeño y se desconoce la causalidad. Dicho esto, el hallazgo es importante porque nos permite mejorar los esfuerzos preventivos y comprender los vínculos con los demás factores de riesgo de la demencia”, menciona Axel C. Carlsson, uno de los autores del estudio.

De acuerdo con una encuesta realizada por la Universidad del Valle de México, casi tres cuartas partes de la población mexicana vive con estrés al menos una vez en el transcurso de la semana. Entre las situaciones más estresantes están la inseguridad (73%), la situación económica (65%), estar desconectado de redes sociales (64%) y el cumplir las expectativas de otros (34%), informa Forbes México.

¿Cuál es la diferencia entre estrés agudo y estrés crónico?

De acuerdo con la American Psychological Association, el estrés se describe como una sensación de agobio, preocupación y agotamiento, afectando a cualquier persona independientemente de su edad, género y circunstancias personales. Es una experiencia emocional molesta que viene con cambios bioquímicos, fisiológicos y conductuales predecibles. El estrés puede funcionar como un empuje para realizar tareas, pero una cantidad excesiva tiene consecuencias sobre la salud.

Créditos: Canva

Según MedlinePlus, existen dos tipos principales de estrés: estrés agudo y estrés crónico. El primero es a corto plazo el cual desaparece rápidamente en cuanto se haya resuelto el problema. Por su parte, el estrés crónico dura por semanas, haciendo que la persona se acostumbre a él y no se dé cuenta de sus efectos en su vida diaria y su salud.

Aumento de la frecuencia cardíaca, hipertensión arterial, diabetes, eczemas, problemas menstruales, alteraciones del sueño, estreñimiento, diarrea, fatiga, dificultad para respirar, son algunos de los efectos en la salud del estrés crónico, detalla Sanitas. El problema recae en que las personas suelen no acudir al médico a pesar de que los síntomas sean evidentes.

¿Cómo influye el estrés crónico en el Alzheimer y el deterioro cognitivo leve?

La investigación fue realizada bajo la base de datos administrativa de asistencia sanitaria de la Región de Estocolmo. El equipo de investigación se centró en pacientes entre 18 a 65 años, identificando 44,447 personas con diagnóstico de estrés crónico y/o depresión. Dichas personas fueron seguidas durante 8 años para ver cuántas eran diagnosticadas con deterioro cognitivo leve o enfermedad de Alzheimer.

Créditos: Canva

Los resultados arrojaron que existía un doble de riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer en los pacientes con estrés crónico y depresión a comparación de quienes no tenían alguna afección. En el caso de quienes vivían con estrés crónico y depresión a la vez era hasta 4 veces mayor.  A la par, existía un riesgo elevado al desarrollar deterioro cognitivo leve.

“Es muy poco frecuente que las personas de este grupo de edad desarrollen demencia, por lo que debemos identificar todos los posibles factores de riesgo de la enfermedad. Aquí demostramos que el diagnóstico es más frecuente en las personas que han sufrido estrés crónico o depresión, pero serán necesarios más estudios si queremos demostrar alguna casualidad al respecto”, subraya Axel C. Carlsson.

(Con información de Infosalus, Forbes México, American Psychological Association, MedlinePlus, Sanitas)