Las sábanas, al igual que otros productos, tienen fecha de caducidad, por lo que no tenemos que esperar a que se rompan o se vean desgastadas para cambiarlas por unas nuevas. Te decimos cada cuánto deberías cambiar tus sábanas por unas nuevas.
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Darte cuenta cuándo es el momento de cambiar las sábanas no es nada fácil, pues a diferencia de las prendas que dejan de quedarte o pasan de moda, éstas pueden parecer útiles por mucho tiempo, sin embargo, no es lo más higiénico.
De acuerdo con un artículo de New York Post retomado por El Confidencial, existe un tiempo de uso para las sábanas, por lo que, terminando ese periodo, es fundamental cambiarlas por unas nuevas, aunque no se vean desgastadas.
¿Cada cuánto cambiar las sábanas por unas nuevas?
Saber no solo cada cuánto lavar las sábanas sino cada cuánto es necesario cambiarlas por unas nuevas es clave para mantener una cama limpia y confortable, además de libre de acumulación de microorganismos como los ácaros.
Según los expertos en limpieza, lo ideal es cambiar las sábanas por unas nuevas cada dos a cinco años, dependiendo de la calidad de la tela y del uso que le demos.
Claro, si antes de ese tiempo las sábanas pierden color, la tela pierde grosor, ya no son cómodas o hay pérdida de elasticidad, lo mejor es sustituirlas tan pronto como se pueda.
El edredón puede tener un tiempo más largo de vida, según apunta el New York Post, ya que se debe cambiar como máximo siete a 10 años después de usarlo por primera vez.
Estos tiempos son estimados y todo depende de con qué frecuencia los laves y si tienes los cuidados necesarios para evitar que las telas se desgasten, como usar un detergente suave y un ciclo de lavado para ropa delicada.
La importancia de tener sábanas agradables
Un artículo de la BBC señala que unas sábanas limpias y agradables no solo hacen que nuestra cama luzca hermosa y que nos sintamos muy cómodos, sino que también influye en cómo dormimos. Al respecto, la doctora Lindsay Browning, psicóloga y experta en sueño, dijo que cuando nuestras sábanas no están lavadas y se ven sucias o huelen mal, puede ser un factor para el insomnio.
La razón es que dormir en unas sábanas que no se sienten agradables no vuelve a tu cama precisamente un lugar donde quieres estar o descanses a gusto.
“Si nos metemos a dormir y nos sentimos relajados y cómodos, ese olor a ropa de cama nueva nos ayuda a sentirnos tranquilos y felices” apunta la especialista.
Además, tienes que lavar tus sábanas una vez a la semana o cada dos semanas como máximo, pues esta ropa de cama acumula fácilmente nuestras propias células muertas de la piel, sudor y ácaros, que favorecen el mal olor y pueden contribuir a las infecciones de la piel.
Esto es especialmente importante si no acostumbras a bañarte antes de dormir, ya que muchas partículas de contaminación o hasta alérgenos se pueden impregnar en tu cabello y piel y luego terminar en tus sábanas, favoreciendo las alergias y otros problemas a largo plazo.
Así que no lo pienses más, si llevas varios años con tus sábanas, es el momento de cambiarlas por unas nuevas para sentirte más cómodo y hasta dormir mejor.
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