¿Esperas con ansias a que llegue el viernes para salir a desestresarte de tu semana laboral pero luego los sábados no puedes ni pararte? No es cruda, puede ser apnea social.
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Los tiempos han cambiado y ahora vivimos una época en donde los viernes son utilizados para salir con los amigos, pero el sábado no podemos ni pararnos por el cansancio, una investigación indica el por qué.
¿Por qué ahora las personas prefieren descansar y no salir en sus días libres?
Un estudio analizó los patrones de sueño de más de 70 mil personas durante tres años para poner nombre a una enfermedad que muchas personas padecen durante el fin de semana y la han nombrado: apnea social.
Este padecimiento es una variación o agravamiento de la apnea del sueño, un trastorno en el que la respiración se detiene o se vuelve muy superficial repetidamente mientras se duerme.
¿Cómo se llevó a cabo la investigación?
Los investigadores de la Universidad de Flinders, en Australia, le han puesto este nombre, porque los desencadenantes podrían ser ambientales: el consumo de alcohol, tabaco y la falta de sueño, que se vuelve más habitual durante el fin de semana.
Para esta investigación se analizó datos de más de 70 mil personas de 23 países durante tres años, pero lo más relevante no es la cantidad, sino la calidad que arrojaron los datos.
La apnea del sueño es una condición tremendamente infradiagnosticada y se calcula que hasta el 80% de las personas que la sufren no son conscientes de esta situación.
El presente estudio se ha valido de una alfombrilla que se coloca debajo del colchón, para obtener datos de sueño fuera del laboratorio en la vida real. Y en la vida real la gente bebe, fuma y trasnocha, especialmente al llegar el fin de semana. Y esto se trasladó de forma muy evidente a sus datos de apnea del sueño.
“Nos sorprendió ver un pico muy pronunciado los fines de semana, que luego, durante la semana, se estabiliza”, afirma Lucía Pinilla, autora principal de la investigación.
¿Por qué es común este padecimiento los sábados?
Muchas personas esperan el viernes con ansias para salir y desestresarse del trabajo, y en la investigación se encontró que la probabilidad de padecer apnea fue un 18% mayor los sábados en comparación con los miércoles. Esta tendencia se mantuvo en todos los países y grupos, pero el efecto era más pronunciado en hombres (eran un 21% más propensos a verse afectados, en comparación con un aumento del 9% en mujeres y en adultos más jóvenes.
Los menores de 60 años tenían un riesgo un 24% mayor los fines de semana, en comparación con el 7% de los mayores de 60 años.
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