Es bien sabido que cuando dormimos bien, y por lo tanto descansamos adecuadamente, nos sentimos más llenos de energías y con mejor actitud ante el día, pero ¿cuál es la mejor posición para dormir y descansar bien?
Dormir es una actividad fundamental para que nuestro cuerpo pueda regenerarse y encontrar el equilibrio necesario para funcionar, y más allá de asegurarnos de dormir entre 7 y 8 horas diarias, también deberíamos enfocarnos en la calidad de nuestro sueño (es decir, qué tan bien estamos descansando).
Te podría interesar
Según expertos, la ergonomía postural durante el sueño, se refiere a esa necesidad que tenemos las personas para elegir una posición para dormir que sea saludable, y que además de ahorrarnos problemas, nos ayude a disminuirlos (como cuando tenemos un dolor corporal).
¿Realmente importa la posición en la que dormimos?
Expertos indican que la posición que tomamos para dormir importa más de lo que podríamos pensar en la calidad de nuestro sueño, ya que podría favorecer (o empeorar), condiciones como la respiración, la relajación, o la disminución de malestares físicos, e incluso ronquidos.
Por esta razón, aseguran, es importante que le damos suficiente importancia a la posición para dormir, y se debe elegir la más saludable, para evitar repercusiones negativas, como:
- Futuras lesiones.
- Empeoramiento de la apnea del sueño.
- Ronquidos más frecuentes e intensos.
- Dolores corporales.
- Mayor riesgo de reflujo.
Una de las primeras muestras de que la posición al dormir sí importa, informan, es el hecho de que muchas veces no podemos sentirnos cómodos, ni conciliar el sueño, sino hasta que hemos tomado una postura que nos resulta suficiente cómoda; de hecho, aclaran que nunca debemos forzarnos a dormir en una posición si no nos sentimos cómodos.
¿Cuál es la mejor postura para dormir?
Entonces, lo ideal es elegir una posición o una postura sana a la hora de dormir, pero entre todas las que hay, ¿cuál es la mejor? Los expertos dicen que esto depende, y que en estos casos, no puede aplicarse el término “un tamaño ajusta a todos” (“one-size-fits all” en inglés), ya que la mejor postura variará de persona a persona, y de sus necesidades o condiciones.
Cada una de las posiciones para dormir a las que podemos recurrir, pueden tener sus beneficios, pero también sus contras, y los expertos las explican a continuación.
Boca arriba, o sobre la espalda.
Para algunos expertos la mejor, para otros la peor, principalmente si sufres de apnea del sueño o si eres de los que roncan al dormir, ya que solo podría empeorar la cantidad (e intensidad) de tus ronquidos.
Por un lado, dormir con la espalda bien unida al colchón, puede ayudar a que no recargues el peso en las articulaciones de tu cuerpo, e incluso contribuye a que el peso quede bien repartido en tu cama; además, podría ayudar a cuidar a tu cara de las arrugas.
Eso sí, se ha observado que al dormir boca arriba, las vías respiratorias pueden verse obstruidas debido a que la lengua y la mandíbula caen, de tal manera que podría empeorar tu descanso; además, existe la posibilidad de que, si no se elije una buena almohada, la espalda se arquee más y se dañe la postura general.
De lado.
En general se considera una posición bastante buena y prácticamente la mejor, principalmente para las mujeres embarazadas, para la digestión, personas que roncan o tienen apnea del sueño, e incluso si hay dolor en espalda baja, ya que en esta posición la columna vertebral está más protegida (y en una posición natural).
De hecho, se ha observado que el dormir de lado (principalmente izquierdo) también puede ser muy útil para las personas que padecen de reflujo gastroesofágico, e incluso sería útil para mejorar los movimientos intestinales.
Sin embargo, esta posición para dormir también tiene sus contras, ya que se ha observado que puede generar tensión en la cadera, los hombros e incluso en la mandíbula. Además, cuando se elige la variación donde se encogen las piernas (posición fetal), en ocasiones puede llevar a sentirse adolorido en las mañanas.
Boca abajo.
Aunque existe debate respecto a dormir boca arriba, todos los expertos concuerdan con que dormir “de panza” contra el colchón, puede ser la peor posición que alguien puede tomar a la hora de dormir, especialmente para el cuello y la columna.
Es sabido que esta postura puede ser útil para evitar ronquidos o la apnea del sueño (debido a que las vías aéreas no se obstruyen del todo), pero, por otro lado, puede causar dolores en el cuello y la espalda, ya que los músculos y articulaciones son sometidas a tensiones innecesarias, dificultando el descanso.
¿Cómo sé qué posición me conviene más?
Especialistas indican que lo que nos indicará si es que una posición para dormir es adecuada o no para nosotros, es considerar evaluar si es que nuestra postura en la cama nos hace sentir suficientemente cómodos para dormir, pero también hace que nos podamos sentir descansados (y sin dolor), al despertar.
Para saber si una posición para dormir nos conviene (o no), es necesario que hagamos diferentes cambios entre posturas, así como un seguimiento al menos por una semana o dos, que nos ayuden a comparar cuál nos ha resultado mejor (en descanso y bienestar general).
Los especialistas, además, informan que si estás considerando en buscar tomar una posición para dormir más sana y menos dañina para tu organismo, consideres estos 7 consejos, que podrían ser útiles:
- Intenta apoyarte de elementos que ayuden a que tu posición para dormir sea más sana, como cojines o almohadas de apoyo, que son útiles en algunas posturas: debajo de las rodillas y de la zona lumbar si duermes boca arriba; entre las rodillas si duermes de lado; debajo del abdomen cuando duermes boca abajo.
- No podrás corregir tu postura de una noche a otra. Se trata de un hábito difícil de cambiar, pero no imposible.
- Duerme siempre con almohada, ya que este objeto ayuda a soportar el cuerpo y aliviar tensiones innecesarias.
- Si tienes dolores en cuello y espalda, quizás sea más conveniente elegir dormir de lado (con una almohada pequeña entre las rodillas) para que sea más beneficioso.
- En caso de querer cambiar tu postura al dormir, ten paciencia y haz un cambio gradual. No te estreses.
- En caso de que tu posición para dormir actual no te esté dando problemas, no es necesario que hagas cambios a tu forma de dormir.
- Lo más importante es asegurarse de que descansas bien y de forma cómoda.
(Con información de: Urban Fisio, Health Line, Mayo Clinic.)