Iniciar con todo el ánimo la escuela es algo primordial para que las niñas y los niños rindan en sus actividades escolares. Sin embargo, no siempre es posible por diversos factores como un sueño deficiente, falta de ejercicio físico o por una mala nutrición. Por ello, para que tus hijas e hijos tengan una vida escolar productiva, te compartimos cómo puedes reforzar su alimentación.
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La organización Save the Children señala que la forma en la que se alimentan niñas, niños y adolescentes tiene repercusiones en su desarrollo. Por ello, una alimentación adecuada desde el nacimiento aumenta las probabilidades de mantener un peso saludable, reduce el riesgo de desarrollar enfermedades y mantiene una vida escolar productiva.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), México puede ser considerado como un país con niñas y niños malnutridos. Datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT), estiman que en el país 2.8% de los niños y niñas menores de 5 años presentan bajo peso y que el 13.6% muestran baja talla y el 1.6% desnutrición aguda.
La población indígena es la más impactada por la pobreza infantil y la que registra mayores tasas de desnutrición en comparación con el resto de la población.
Relevancia de una buena nutrición de las niñas y niños en la vida escolar
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) señala que la salud y la buena alimentación en un ambiente escolar consisten en invertir tanto en la educación de las niñas y niños así como en su salud, con beneficios que se extienden a los hogares y las comunidades.
Garantizar la salud y el bienestar de las niñas y niños es una de las formas más transformadoras para tener una vida escolar productiva. Una buena nutrición también promueve la inclusión, la equidad y reconstruir el sistema educativo, especialmente tras la pandemia de covid-19.
Además, según un informe publicado por esta misma organización en 2022, las niñas, niños y adolescentes sanos con una buena nutrición son más felices, aprenden mejor y tienen más probabilidades de llevar una vida sana y plena.
¿Qué podemos hacer para lograr una mejor nutrición de las niñas y los niños?
Para transformar la vida escolar de las niñas, niños y adolescentes, el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (PRONAPINNA) sugiere las siguientes medidas:
- Niñas, niños y adolescentes deben consumir una dieta balanceada de: cereales, lácteos, carnes, huevos, frutas y verduras.
- Tomar abundante agua (por lo menos 1.5 litros de agua sin saborizantes y líquidos de la comida como caldos y sopas).
- No deben consumir en exceso alimentos altamente procesados (refrescos, galletas, embutidos, etc.) El etiquetado actual permite a mamás y papás conocer las porciones que pueden consumir.
- Mamás, papás y personas cuidadoras pueden ayudar con el ejemplo a que niñas, niños y adolescentes no desperdicien alimentos y coman en tiempos y lugares establecidos.
- Se recomienda que la niñez y la adolescencia realicen actividades físicas mínimo 60 minutos diarios.
- Dormir lo suficiente. De nueve a 12 horas diarias de los seis a los 12 años y mínimo de ocho a 10 horas de los 13 a los 18 años.
Además del papel fundamental de las familias en la alimentación de niñas, niños y adolescentes, México requiere fortalecer las medidas necesarias para garantizar los servicios de salud y nutrición de calidad en la niñez y adolescencia, además de representar un derecho para la población, es una obligación del Estado.
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