Terminar una relación amorosa para nada es fácil y esto puede ser muy doloroso para las personas que lo sufren y a continuación, te diremos las fases que se atraviesan después de cortar con tu pareja.
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Es completamente normal que después de terminar una relación amorosa te sientas triste, destruido y sin motivación de hacer nada, pero recuerda que la mayoría de las personas pasan por algunas fases después de romper con su ser amado, y después de ello, pueden continuar con su vida y ahora tienen mayores conocimientos sobre el amor.
¿Cuáles son las fases por las que se atraviesa después de un rompimiento amoroso?
Tras una ruptura de pareja, las personas pasan por diferentes fases que componen un cuadro de duelo y es importante que las conozcas para saber cómo enfrentarlas si estás viviendo algo así:
- Estado de impacto o shock
El portal de La mente es maravillosa señala que es el principio del duelo, ya que en esta fase la persona no acaba de creérselo, le cuesta ser consciente de la pérdida y ver la nueva situación. Emocionalmente, en la fase de impacto o shock se ve una ausencia de reacción y la persona puede actuar como si no hubiera pasado nada y todo siguiera igual.
- Negación
Dentro de las fases del duelo en la ruptura de pareja, se encuentra la negación. En ella, la persona es consciente de lo que ha perdido, pero no quiere aceptarlo. Se niega a aceptar que la relación ha terminado y fantasea con volver.
Cuando las personas se encuentran en la fase de negación, la mente se centra en buscar maneras de solucionar los problemas, y así poder retomar la relación en pareja.
- Tristeza profunda
En esta fase se comienza a asumir y vivir en la propia piel lo que representa la ruptura. La persona comienza a ser consciente de cómo ha cambiado y seguirá cambiando la vida.
En esta fase la persona se da cuenta de las consecuencias de la pérdida y esto genera una tristeza profunda acompañada de una visión negativa del mundo, el futuro y ellos mismos.
- Culpa
La fase de culpa es una de las más características. Este sentimiento te lleva a darle vueltas a la cabeza respecto a qué podrías haber hecho o dicho para no haber perdido la relación.
La rumiación y el pensamiento obsesivo dirigido a buscar responsables de la ruptura puede llegar a ser agotador mentalmente y provocar un gran estado de ansiedad.
- Enojo
Una vez que dejas de sentir que todo es tu culpa y puedes repartir la responsabilidad de lo ocurrido, comenzarás con el sentimiento de enojo. Esta suele ser la fase más beneficiosa o positiva, ya que, si algo te genera enojo, lo evitas y buscas sacarlo de tu vida.
- Aceptación
Las personas en esta fase comienzan a asumir lo sucedido, a pensar en sí mismas y a dirigir su menta hacia el futuro y no hacia el pasado o a la pérdida. La aceptación es la vía definitiva para la superación de la ruptura y ayuda a pensar en construir un mejor futuro para todos.
Recuerda que terminar una relación amorosa para nada es fácil y puede verse abrumador, sin embargo, la mayoría de las personas atraviesan por estos difíciles momentos, así es que no es el fin del mundo, si te está costando demasiado trabajo superar una ruptura amorosa, también te puedes apoyar en un especialista de la salud mental.
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