Las discusiones con tu pareja son normales ya que forman parte de la convivencia del día a día y no siempre se puede estar de acuerdo con las personas, pero es fundamental que sepas gestionar tus enojos y a continuación te diremos 5 lecciones que puedes aprender al discutir con tu pareja.
Un buen indicio de que alcanzaste un grado de madurez importante es cuando sabes gestionar los conflictos de pareja, tanto en relaciones de noviazgos como en los matrimonios.
Te podría interesar
5 lecciones que puedes aprender al discutir con tu pareja
Todas las relaciones de pareja saludable pasan por momentos en los que ambos discuten. Y es normal que así sea, debido a que cuando se convive con alguien se pueden crear ciertas diferencias, pero a continuación te mostramos las lecciones que puedes aprender al discutir con tu pareja:
Se pueden decir cosas que normalmente no se atreverían
Estudios científicos demuestran que cuando se discute con la pareja se tienen más probabilidades de decir la verdad que cuando se tiene una conversación normal.
En ocasiones se reprimen sentimientos y al discutir con tu pareja es buen momento para sacarlos, aunque es fundamental que no digas cosas que no piensas y siempre lleguen a un bien común.
Alargan la vida
Un estudio de la Universidad de Michigan, publicado en la revista Journal of Family Communication, señala que las discusiones de pareja ayudan a alargar la vida del ser humano.
Entre las consecuencias de guardar las cosas se encuentran el aumento de la presión arterial alta, la coagulación de la sangre y el riesgo de padecer una obstrucción vascular mortal.
Interrumpen la monotonía
Discutir también es una forma de comunicación, por lo que puede ayudar a que se conozcan mejor, sobre todo si se animan a profundizar y decir verdades, lo que refuerza más la relación e interrumpe la monotonía de la pareja.
Refuerzan la relación
Discutir sobre los problemas que existen en la relación, puede ser un buen motivo para superar las diferencias que existen en la pareja y así reforzarla, haciendo que ésta sea más fuerte al haber menos cosas que se interpongan.
Discutir no es lo mismo que pelear
Discutir es normal, esto ayuda a impedir que los problemas de pareja vayan haciéndose cada vez más grandes a pesar de que no hablen de eso. La clave es no hacer como si no hubiera pasado nada, sino tener una conversación abierta de lo que les gusta y lo que les decepciona de la relación.
Es importante hablar acerca de las acciones concretas que realiza cada uno y que pueden ser más o menos mejorables o evitables, en vez de solo atacar a tu pareja. También hay que mostrarse abierto para hablar.
(Con información de: Psicología y mente y Zank you)