Ponerle fin a una relación es un proceso complejo y emocional que a menudo se ve afectado por una gran diversidad de sentimientos que no nos permiten pensar con claridad. Debido a ese dilema mental, muchas veces no sabemos qué decisión es la correcta, sin embargo, existen algunas preguntas esenciales que pueden ayudarte a tener mucho más claridad sobre la situación.
Según Mundo Deportivo, estas son preguntas esenciales que la psicóloga Siyana Mincheva recomienda para darle sentido a nuestros pensamientos y ayudarnos a tomar la decisión de romper lazos o no con nuestra pareja. Toma nota.
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1. ¿Consideras que evitas las conversaciones incómodas?
Si eres una persona que evita las conversaciones incómodas debes de trabajar en ello y procurar afrontarlas, pues ignorarlas o aplazarlas provoca que las situación escale a un lugar en el que no haya un desenlace tranquilo o pacifico con tu pareja.
Sin duda, en una relación las conversaciones incómodas son inevitables y necesarias para tener una mejor comunicación y fortalecer o terminar el vínculo que tienes con tu pareja. Mincheva señala que evitar estas conversaciones puede reflejar la falta de inversión emocional que le otorgas o la otra persona le otorga a su relación.
2. ¿Me planteo romper mi relación porque hubo algo que me chocó y no entiendo?
Por otro lado, Psicología y Mente detalla que muchas veces las dudas de si cortar o no una relación de pareja surgen cuando ocurre una situación que pone en duda todo lo que creíamos saber de la otra persona, como una infidelidad, la omisión de información importante, entre otras cosas, por mencionar un ejemplo.
Cuando ocurre esto, vale la pena recordar que no hay leyes naturales que digan "cuando pasa esto, se debe romper la relación”. Lo que importa es tu percepción de esos hechos y, sobre todo, cómo te sientes con la situación. Por eso es importante que si crees que no entiendes algo, le des la oportunidad al otro de explicarte la situación.
3. ¿Considero a mi pareja responsable de mi felicidad?
En palabras de Mincheva, buscar la felicidad en los demás es como buscar un reflejo en un río turbulento. La especialista insiste en que cada persona es responsable de su propia felicidad y que, depositarla en otras personas nos deslinda de esa importante tarea.
Entender que nuestra pareja solo es alguien que decide estar con nosotros porque así lo quiere y le interesa hacerlo, pero que de ella no depende nuestra felicidad, nos ayuda a comprender la importancia de ser los arquitectos de nuestro propio bienestar, en lugar de esperar que otro construya aquello de lo que somos responsables.