En temporada de calor, es común optar por platillos frescos y muchas veces a base de mariscos, como un coctel de camarón o un ceviche, pero debemos tener cuidado, ya que el consumo de estos alimentos puede tener riesgos ante las altas temperaturas. Te damos consejos para cuidarte.
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De acuerdo con la Comisión de Protección Contra Riesgos Sanitarios de Jalisco, comer mariscos poco cocidos o crudos cuando hace calor incrementa hasta en un 30% el riesgo de serias infecciones gastrointestinales e intoxicaciones.
Por su parte, la Comisión Nacional de Protección Social en Salud explica que esto se debe a que los mariscos o productos del mar son de fácil descomposición, lo que, aunado al calor, aumenta el riesgo de consumirlos en mal estado y sufrir infecciones graves.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) menciona que existen más de 200 enfermedades por ingerir alimentos contaminados con bacterias, virus y parásitos. En el caso del consumo de mariscos, pueden incrementar el riesgo de infección por salmonela, rotavirus y E. coli.
¿Cómo prevenir infecciones intestinales por comer mariscos?
Las infecciones intestinales que pueden causar los mariscos en mal estado, pueden tener síntomas importantes que incluso pueden requerir de hospitalización, por lo que es importante saber cómo prevenir.
Entre los síntomas principales que alertan una infección intestinal causada por virus o bacterias destacan:
- Diarrea
- Fiebre
- Calambres abdominales
- Náuseas y vómitos
- Escalofríos
- Dolor de cabeza
- Sangre en las heces
Se cree que el limón es suficiente para “matar” todos los microorganismos que puede tener la carne cruda de pescados o mariscos, pero la realidad es que no es suficiente y puede representar un mayor riesgo en esta temporada de calor.
Lo mejor es evitar preparaciones como ceviches, ostiones crudos y aguachiles, ya que la carne no está bien cocinada y puede tener virus y bacterias peligrosos. Puedes comer pescados y mariscos siempre y cuando estén cocinados y tomando en cuenta estas recomendaciones al comprarlos:
- Asegúrate de que estén congelados o en planchas de hielo
- Revisa que los pescados tengan ojos brillantes y escamas bien pegadas al cuerpo, ya que es señal de que está fresco
- Si detectas que el pescado está muy aguado, significa que está en proceso de descomposición
- Compra los ostiones, conchas y moluscos con las conchas cerradas, ya que si están abiertas pueden estar contaminados
- Evita descongelar los mariscos a temperatura ambiente, pásalos del congelador al refrigerador para evitar que se desarrollen bacterias
- No comas productos crudos o solo con limón, ya que no mata las bacterias
Ante cualquier síntoma de una infección gastrointestinal acude al médico y sigue el tratamiento tal y como te lo indique.
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