Incluso antes de que empiece Día de Muertos en noviembre, octubre es el perfecto preámbulo para disfrutar de todas las delicias que esta temporada otoñal nos trae entre las que destaca el pan de muerto.
Este rico y tradicional pan nos colma de alegría y ricos sabores por toda la gran variedad que actualmente existe en el país. Sin embargo, este rico alimento tiene un único defecto, pues, al ser tan dulce y sabroso, no todas las personas pueden darse el lujo de comerlo, pues representaría un problema de salud significativo como en el caso de las personas diabéticas.
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Pero no todo está perdido. Como mencionamos antes, la gran variedad de sabores y preparaciones de este rico pan hace que sobresalga una versión poco tradicional que seguro harán a más de una y uno sonreír por su bajo contenido en calorías harina de grano entero: el pan de muerto vegano.
¿Qué es el pan vegano?
De acuerdo el portal Polvillo, el pan vegano es aquel que no contiene ningún ingrediente de origen animal, es decir, que en su elaboración no se usa leche (ni derivados), huevos, miel, o cualquier otro producto de este tipo.
El pan vegano se lleva perfecto con las personas diabéticas debido a que mucho de este se elabora con harinas de grano entero y sin procesar, aportando fibra y una sensación de saciedad, detalla el portal Cardamomo.
Receta para elaborar pan de muerto vegano
Debido al incremento y popularidad del pan vegano, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) compartió una receta para hacer tu propio pan vegano. Aquí te dejamos la receta:
Ingredientes:
- ½ kilo de harina de grano entero sin procesar
- 1 sobre de levadura casera (11 gramos)
- 7 cucharadas soperas de Stevia
- ¼ cucharada sopera de sal (6 gramos)
- 2 cucharadas de puré de manzana
- 90 gramos de margarina sin sal
- 2/4 de taza de agua o leche vegetal (como de almendras, soya o coco) tibia 150 mil
- 1 cucharada de saborizante de vainilla, naranja, agua de azahar o el de tu preferencia
Preparación:
En una superficie lisa, forma un “volcán” con harina. En el centro haz un hueco y vierte poco a poco el agua, la leche tibia, la levadura casera. Mezcla todo con las manos y deja reposar por 10 minutos.
Después, integra los demás ingredientes hasta obtener una masa que no sea pegajosa, sino fácil de manejar y cúbrela con un plástico. Debes dejar la masa reposar en un sitio tibio hasta que esponje y duplique su tamaño (el tiempo aproximado es de 45 a 75 minutos).
Ahora debes separar la masa de acuerdo a la cantidad que utilizarás. Puedes decorarlo con pequeños huesos con la misma masa si así lo deseas. Posteriormente, debes dejar fermentar la maza hasta que duplique su tamaño (aproximadamente 90 a 120 minutos).
Por último, hornea durante 15 minutos a una temperatura de 190 centígrados, después reduce la temperatura a 170 centígrados y vigila la masa hasta tener una cocción total. Deja enfriar el resultado final y, por último, barniza el pan con margarina derretida o decóralo como gustes.
Recuerda que debes regular las cantidades de lo que comes para prevenir cualquier alteración en tu organismo.