La demencia es el resultado de diversas enfermedades y lesiones que afectan el cerebro. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la enfermedad de Alzheimer es la forma más común con entre un 60 y 70% de los casos y aunque hasta ahora se sabe que la edad, la hipertensión descontrolada y la diabetes son los principales factores de riesgo, un nuevo estudio alerta la relación de esta enfermedad con el consumo de cannabis (Marihuana).
La demencia es un síndrome que puede surgir por una serie de enfermedades que poco a poco, destruyen las células nerviosas y dañan el cerebro, lo que deteriora la función cognitiva, es decir, la capacidad de procesar el pensamiento.
Te podría interesar
Las personas que desarrollan la enfermedad pueden comenzar con cambios de humor o de conducta mucho antes de que aparezcan los problemas de memoria, como sensación de ansiedad, tristeza o enojo, cambios en la personalidad o conducta inapropiada.
Con el tiempo, pueden aparecer otros síntomas como olvidar cosas o acontecimientos recientes, perder cosas constantemente, sentirse desorientado al caminar o al estar en lugares familiares, perder la noción del tiempo, tener dificultades para resolver problemas o tomar decisiones y para realizar tareas habituales.
Consumo de cannabis y su vínculo con la demencia: esto dice un estudio
De acuerdo con un reciente estudio publicado en JAMA Neurology, expertos identificaron una asociación preocupante entre las visitas a servicios de urgencias por consumo de cannabis y un aumento en el riesgo de desarrollar demencia.
La investigación analizó datos de más de 6 millones de adultos canadienses de 45 años o más, sin diagnóstico previo de demencia.
Los hallazgos fueron preocupantes, ya que detectaron tres puntos importantes:
- Hay mayor riesgo de demencia en usuarios de cannabis: Los individuos que acudieron a emergencias médicas debido al consumo de cannabis presentaron un 23% más de probabilidades de ser diagnosticados con demencia en los cinco años siguientes, en comparación con quienes recibieron atención médica por otras razones.
- Comparación con la población general: En comparación con la población general, aquellos que buscaron atención médica por problemas relacionados con el cannabis tuvieron un 72% más de riesgo de desarrollar demencia en el mismo período.
- Incremento en hospitalizaciones: Entre 2008 y 2021, las hospitalizaciones relacionadas con el cannabis aumentaron cinco veces, y en adultos mayores de 65 años, el incremento fue de casi 27 veces, lo que habla de una población extensa en riesgo de demencia.
¿Cuáles son las implicaciones de estos hallazgos?
El estudio no establece una relación causal directa entre el consumo de cannabis y la demencia, sin embargo, destaca una asociación significativa que merece atención.
Los investigadores sugieren que el uso regular de cannabis podría afectar directamente la estructura cerebral o aumentar el riesgo de factores asociados con la demencia, como la hipertensión, lesiones cerebrales, depresión y aislamiento social.
Debido a que hay evidencia del creciente uso de cannabis entre adultos mayores, estos hallazgos podrían tener implicaciones importantes para la salud pública y la necesidad de monitorear y educar sobre los posibles riesgos asociados.
Recordemos que la demencia tiene consecuencias no solo físicas y psicológicas, sino sociales, económicas y familiares, ya que hay una falta de concienciación y de comprensión sobre esta enfermedad que puede causar estigmatización y obstaculizar el diagnóstico y atención adecuados.
Actualmente no existe cura para la enfermedad de Alzheimer u otras demencias relacionadas como la demencia con cuerpos de Lewy, la demencia vascular, la frontotemporal o la mixta, pero hay medicamentos y cambios en el estilo de vida que pueden mejorar o estabilizar temporalmente la memoria y las habilidades de pensamiento en algunas personas.
Recomendaciones en caso de ser consumidor de cannabis
El Instituto Nacional de Abuso de Sustancias en Estados Unidos, señala que los productos del cannabis con tetrahidrocannabinol o THC pueden provocar cambios en el estado de ánimo, los pensamientos y la percepción de la realidad. Estos productos también pueden causar efectos dañinos en la salud en el cerebro y otras partes del cuerpo.
Entre sus efectos secundarios se encuentra la ansiedad, miedo, desconfianza, pánico o alucinaciones y alteraciones físicas como el aumento de apetito, un ritmo cardiaco elevado y problemas respiratorios. Por ello, es importante tener en cuenta algunas recomendaciones:
- Consulta médica: Los usuarios de cannabis, especialmente aquellos mayores de 45 años, consulten con profesionales de la salud sobre su consumo y los posibles riesgos asociados.
- Monitoreo de la salud cognitiva: Estar atentos a cambios en la memoria, el pensamiento y el comportamiento, y buscar evaluación médica si se presentan síntomas preocupantes.
- Educación y prevención: Participar en programas de educación sobre el uso responsable del cannabis y sus posibles efectos a largo plazo en la salud cerebral.
Para enterarte de toda la información que necesitas sobre salud y bienestar síguenos en Facebook y TikTok