En los últimos años cada vez más personas, especialmente mujeres, han decidido dejar de teñirse las canas. Durante mucho tiempo se ha considerado, erróneamente, que el cabello canoso es señal de “dejadez” o de “descuido”, una idea arraigada en la sociedad que asocia el envejecimiento con algo negativo. Sin embargo, desde la psicología, las canas pueden reflejar una transformación tanto externa como interna.
Te podría interesar
Autoaceptación, un significado detrás de las canas
Una encuesta realizada en 2022 reveló que la mitad de las mujeres entre 42 y 57 años había teñido su cabello durante los últimos dos a seis años. Incluso una de cada tres ni siquiera sabía cuál era su color natural. En Psychology Today, Meredith Gordon apunta que hay “algo de melancolía en esa segunda estadística, algo triste sobre no saber algo tan personal sobre uno mismo”.
En ese sentido, la tendencia de dejar que las canas crezcan sin teñirlas refleja mucho más que una decisión estética: es un acto de aceptación personal.
Foto: Canva
Dejarse las canas, además, va más allá de la experiencia externa. Una investigación en The Journals of Gerontology sugiere que la aceptación de los signos del envejecimiento puede estar relacionada con un mayor sentido de bienestar emocional y una mejor capacidad para disfrutar de la vida y las relaciones. Así, aceptar los cambios por los que atraviesa el cuerpo es un paso hacia la madurez emocional.
Dejarse las canas, un proceso de liberación
Algunas personas experimentan un proceso de liberación cuando dejan que su cabello crezca como es, ya que se alejan de las expectativas sociales sobre la juventud y la belleza, y aceptan su verdadera naturaleza.
“Dejar que mis canas crezcan me ha hecho verme a mí misma con otros ojos, y no solo mi reflejo en el espejo. Me ha llevado a verme desde dentro, todas las partes que he intentado cubrir para pertenecer”, confiesa Gordon. “En algún punto, después de teñir mi cabello durante tres décadas, llegué a un punto en el que estaba lista para mirar al futuro en lugar de al pasado”.
También es posible que muchas personas decidan hacerlo por razones prácticas, como ahorrarse el tiempo y el dinero que solían dedicar a eso. Y eso también puede ser parte de un proceso de liberación. “Esas son buenas razones”, dice Gordon. “Pero también he comprendido que mis raíces muestran mi futuro, mientras que lo que queda de tinte en mi cabello muestra el pasado”.
Foto: Canva
Las canas no son señal de descuido. De hecho, las personas que deciden dejar sus canas como son muestran que se aceptan a sí mismas tal cual son, en todas las etapas de la vida. Las canas son una parte natural del proceso de envejecimiento y un recordatorio de que todas las edades son valiosas y relevantes.
Para enterarte de toda la información que necesitas sobre salud y bienestar síguenos en Facebook y TikTok.