Pese a que el calor intenso ha disminuido en los últimos días, las altas temperaturas son un factor preocupante para algunos especialistas, pues hay una relación directa entre el calor y el deterioro de la salud mental, detalla un reciente meta-análisis.
Según El Español, este análisis (derivado de 88 estudios) indica que las olas de calor y las temperaturas extremadamente altas estás asociadas con un mayor riesgo de trastornos mentales y de comportamiento. Además, enfatiza que otros efectos climáticos como las bajas temperaturas, la humedad, el viento o la duración de la luz solar no tienen un impacto igual de significativo.
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¿Qué se sabe hasta ahora?
El estudio, liderado por Dongyung Li, de la Universidad A&M de Texas, y publicado en la revista Science of the Total Environment detalló que el riesgo de presentar depresión y principalmente de esquizofrenia durante temporadas de altas temperaturas, aumenta entre un 5% y un 18%. También son afectados los estados de ánimo y los trastornos afectivos.
Otra investigación publicado en la revista Environment International y liderada por Peng Bi, de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Adelaida, Australia, cuantificaba los efectos que mortalidad relacionada con problemas de salir mental por cada grado que aumentaba la temperatura.
Tras revisar 53 estudios publicados entre 1990 y 2020, los investigadores acumularon casi cuatro millones de casos de eventos y muertes relacionadas con trastornos mentales, concluyendo que el aumento de un grado en la temperatura ambiente se podía asociar a un incremento de 2.2% la mortalidad relacionada con la salud mental.
Además, diversas investigaciones demuestran que las áreas del cerebro responsables de enmarcar y resolver tareas cognitivas complejas se ven afectadas por el estrés térmico, provocando incluso que la gente se torne agresiva, de acuerdo con The conversatión.
¿Por qué las altas temperaturas afectan la salud mental?
Existen varias hipótesis que intentan aclarar por qué el calor afecta la salud mental. Una de ellas explica que la temperatura altera el equilibrio de los neurotransmisores clave: la serotonina y la dopamina. Ambas están implicadas en el estado de ánimo, las funciones cognitivas y el desempeño mental en tareas complejas. Otra hipótesis apunta que la inflamación cerebral producida por el calor puede jugar un papel clave en la depresión, la psicosis y el deterioro cognitivo.
No obstante, aún es necesario seguir estudiando estos síntomas relacionados al calor. En palabras de Manuel Martín Carrasco, vicepresidente de la Sociedad Española de Psiquiatría y Salud Mental, las dificultades que atraviesan los estudios que abordan este tema siguen siendo “resultados muy erráticos”, detalla Cuídate Plus.
(Con información de Cuídate Plus, The Conversation, El Español, Science of the Total Environment).