El cantante y ex integrante del popular grupo OV7, Kalimba, dijo en una reciente entrevista que desde hace 25 años lucha contra el trastorno bipolar, aunque fue diagnosticado médicamente apenas hace un año.
Tras la polémica por la demanda de abuso sexual que hay en su contra, Kalimba se sinceró sobre la condición emocional que padece y cómo lo ha sobrellevado.
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“Soy bipolar diagnosticado, tengo bipolaridad en segundo grado. La gente cree que ser bipolar es que de repente estás de buenas y de repente de malas, pero ni cerca. La bipolaridad es que tus emociones están muy disparadas”, dijo en una entrevista con Luisito Rey.
Agregó que empezó a tratarse en cuanto fue diagnosticado, pero hasta ahora, ha podido sobrellevarlo sin ningún prejuicio de los que están relacionados con este trastorno.
¿Qué es el trastorno bipolar grado II?
De acuerdo con Benjamín Guerrero López, jefe del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM, el trastorno bipolar es un padecimiento mental que afecta aproximadamente al 3% de la población mexicana, con mayor frecuencia a adolescentes y adultos jóvenes.
La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos señala que el trastorno bipolar es una afección del estado de ánimo que puede provocar cambios de ánimo intensos.
Se caracteriza por dos principales estados:
Estado maníaco: La persona se siente extremadamente “animado” o eufórico, con energía.
Estado depresivo: Tras unos días o semanas, es posible sentirse deprimido, triste o indiferente. También puede haber desesperanza.
Esta entidad de salud refiere que se pueden tener síntomas maniacos y depresivos a la vez, lo que se conoce como episodio mixto.
Existen tres tipos de trastorno bipolar, reporta MedlinePlus.
Trastorno bipolar I: Incluye episodios maniacos que duran 7 días al menos o síntomas maniacos tan graves que se necesita de hospitalización. También hay episodios depresivos frecuentes.
Trastorno bipolar II: Es el que padece el cantante Kalimba y se caracteriza por episodios depresivos, pero en lugar de graves episodios maníacos, se presentan episodios hipomaníacos, una versión menos grave de la manía.
Trastorno ciclotímico: Presenta síntomas hipomaniacos y depresivos, pero no son tan intensos o duraderos.
La Administración de Alimentos y Medicamentos en Estados Unidos (FDA) señala que, en el segundo tipo de este trastorno, denominado trastorno bipolar de tipo II, las personas tienen episodios maníacos menos intensos (lo que se conoce como “hipomanía”) y pueden ser productivas, sintiendo que no hay un problema grave.
Sin embargo, la hipomanía puede convertirse en episodios depresivos mayores. Por ello, es importante tener un diagnóstico.
¿Cómo reconocer los síntomas del trastorno bipolar?
Es importante aprender a reconocer los episodios maniacos y los depresivos, que generalmente manifiestan con las siguientes señales:
Episodio maniaco. Sentirse optimista, eufórico y animado, estar acelerado o más activo de lo habitual, sentir que los pensamientos van muy rápido, parecer extremadamente irritable, dormir menos, sentirse demasiado talentoso o poderoso, hacer cosas arriesgadas como gastar mucho dinero o beber en exceso.
Episodio depresivo. Sentirse muy triste, desesperanzado, inútil, tener poca energía, hablar muy despacio, sentirse solo, aislarse, falta de interés en actividades habituales, dormir demasiado, comer mucho o muy poco, pensar en la muerte o el suicidio.
Al tener estos síntomas por mucho tiempo, es importante acudir con un especialista en salud mental, que puede hacer el diagnostico con un examen físico, una historia clínica, pruebas médicas y evaluaciones de salud mental.
Los principales tratamientos para el trastorno bipolar incluyen medicamentos y psicoterapia o terapia de conversación, además de complementar con ejercicio regular o en algunos casos, terapia electroconvulsiva.
Cabe destacar que el trastorno bipolar no se cura, se controla con un tratamiento adecuado, que permite vivir una vida saludable y sin problemas graves.
“Es necesario quitarse el estigma para acudir con un psiquiatra y recibir ayuda”, concluye Guerrero López.
(Con información de MedlinePlus, FDA, UNAM)