TRASTORNO BIPOLAR

Día Mundial del Trastorno Bipolar: conciencia y estigma social

El trastorno bipolar es multicausal e influyen factores genéticos, ambientales y estilos de crianza. Diagnosticarlo de forma temprana es el principal reto que tienen los médicos generales de primer nivel.

Escrito en MENTE SANA el

Desde la alegría extrema a la depresión profunda, las personas bipolares transitan procesos emocionales y cognitivos en cuestión de días o semanas. 

El trastorno bipolar es un padecimiento mental que afecta aproximadamente al 3% de la población mexicana, con mayor frecuencia a adolescentes y adultos jóvenes, explica el jefe del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM, Benjamín Guerrero López en un boletín de la UNAM.

En el marco del Día Mundial del Trastorno Bipolar, el psiquiatra López busca generar conciencia sobre este padecimiento y tratar de erradicar el estigma social que existe sobre las personas que lo parecen.

¿Qué es el trastorno bipolar?

El trastorno bipolar es una alteración que puede tener una persona en sus emociones, cogniciones, forma de pensamiento y razonamiento. Esto también se ve reflejado en sus conductas. La persona pasa de estar alegre, optimista o irritable (etapa maniaca) a presentar episodios de tristeza o depresión (etapa depresiva), explica López.

Cabe mencionar que durante las fases maniacas y depresivas existe el riesgo de pensamientos suicidas que en el primer caso pueden ser difíciles de identificar.

Por otro lado, cuando los cambios repentinos de humor ocurren el mismo día, se trata de episodios mixtos donde la persona pasa de estar alegre y de buen humor a tener falta de energía y sueño.

(Foto:Canva)

La mayoría de las veces, los síntomas del trastorno bipolar comienzan durante la adolescencia tardía o la adultez temprana. Aunque los síntomas pueden aparecer y desaparecer de forma deliberada, este trastorno requiere un tratamiento de por vida. No desaparece por sí solo, según datos del Instituto Nacional de Salud Mental de EE.UU.

Este trastorno, según el boletín de la Dirección de Comunicación Social (DGCS) de la UNAM, es multicausal, por tanto, influyen factores genéticos, ambientales y estilos de crianza.

El estigma: una barrera social

Años atrás este padecimiento mental era nombrado como una enfermedad maniaco-depresiva que estigmatizaba a todas las personas que eran diagnosticadas con ella. A mediados del siglo XX, el Manual Diagnóstico Estadístico de los trastornos mentales le cambió el nombre a trastorno bipolar.

“Una de las causas que llevó a hacer esta modificación es tratar de quitar los términos de enfermedad debido al estigma que generaba decir enfermo mental. El estigma es una situación importante, una barrera para que la gente se atienda; por ello se optó por la palabra trastorno”

-Psiquiatra Benjamín Guerrero López.

El especialista también afirma que esta conmemoración es importante porque ayuda a visibilizar el problema de salud mental que existe no solo en México, en el mundo entero.

¿Existe tratamiento para el trastorno bipolar?

Las personas con trastorno bipolar cuando son diagnosticadas requieren un tratamiento combinado con medicamentos que disminuyen la sintomatología depresiva o maniaca.

(Foto:Canva)

A su vez, el tratamiento se complementa con psicoterapia, un ajuste personalizado de los medicamentos, actividad física, así como un ambiente saludable en casa y buena alimentación sin el consumo de drogas como tabaco o alcohol.

En muchas ocasiones llevar a cabo el tratamiento no es sencillo, pues muchos pacientes se niegan a seguirlo porque creen que no lo necesitan o simplemente no perciben la magnitud del diagnóstico.

Al respecto, el especialista en psiquiatría Benjamín Guerrero López, enfatiza la importancia de observar si hemos tenido episodios depresivos frecuentes; ánimos excesivos que después nos provoquen sueño. Incluso conocer el historial medio familiar nos puede dar una idea, en caso de que algún integrante haya tenido el trastorno.

“Es necesario quitarse el estigma para acudir con un psiquiatra y recibir ayuda”, concluye.

(Con información de DGCS, NIH, Instituto de Salud para el Bienestar)