La edad no es un obstáculo para viajar. Por eso, las personas adultas mayores también necesitan disfrutar de unas vacaciones saludables y, si son en familia, mucho mejor. Eso sí, tomando en consideración una serie de precauciones, desde la planificación al propio viaje. A continuación, te compartimos algunos consejos para viajar con algún familiar con demencia.
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De acuerdo con Mayo Clinic, el término demencia se utiliza para describir un grupo de síntomas que afectan la memoria, el pensamiento y las habilidades sociales. En algunas personas que tienen demencia, los síntomas interfieren en su vida diaria. La demencia no es una enfermedad específica, sino que muchas enfermedades pueden causarla.
Para evitar percances con nuestros familiares adultos mayores, la doctora Nieves Fernández Letamendi, especialista en Geriatría del Hospital Quirón Salud Zaragoza sugirió al portal Tu canal de salud las mejores recomendaciones para viajar con una persona con demencia sin mayores percances y que toda la familia disfrute. Toma nota.
Consejos para viajar con un ser querido con demencia
Las vacaciones son un momento para disfrutar, desconectar y relajarse. Sin embargo, las personas adultas mayores pueden sentir ansiedad con el viaje. Para prevenirlo, la principal medida es organizar y preparar todo con antelación.
Antes de viajar con un familiar con demencia, debes tomar en consideración los siguientes rubros:
- Medicación. Antes del viaje debemos preparar los medicamentos de nuestro familiar, calculando la cantidad que se va a necesitar para todas las vacaciones, incluyendo un poco más por si se pierde alguna. De esta manera, aseguramos que pueda continuar con el tratamiento.
- Informe actualizado. En él se deben incluir los antecedentes del familiar.También es importante saber dónde se encuentra el hospital más próximo a nuestro alojamiento.
- Pañales, compresas o colector. Si nuestro familiar sufre pérdidas de orina, es conveniente ser previsor.
- Calzado adecuado. Para realizar caminatas por el monte, lo mejor es que usen zapatos cerrados y adaptados. Y si detectamos cualquier herida, debemos consultarlo con el especialista. De preferencia, que use tenis todo el tiempo.
- Gorras o viseras, gafas de sol y crema solar. Son esenciales para proteger a nuestros familiares con demencia de la incidencia del sol. Además, hay que evitar exponerse al sol entre el mediodía y las seis de la tarde.
- Objeto con el que está familiarizado. En el caso de viajar con un adulto mayor con deterioro cognitivo o demencia, es aconsejable llevar un elemento que forme parte de su rutina, como un cojín, una colcha o una foto que esté habitualmente en el salón.
Además de las medidas anteriores, expertos de AARP recomiendan que antes de salir pienses en los posibles problemas que podrían surgir en el camino y cómo podrías manejarlos.
Una forma de solucionar la situación es visitar un lugar cercano a la casa para saber cómo se siente nuestro familiar. Así mismo, explicale el plan a la persona para saber si está de acuerdo, pues al ser un viaje familiar es bueno conocer su opinión y no solo asumirlo.
También intenta dejar que haya tiempo de inactividad y haz que los planes sean flexibles, no dudes en cancelar algunos si tu familiar se siente abrumado o no es recomendable que vaya desde el punto de vista del médico.
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