El envejecimiento es un proceso natural del cual las personas deberían de sentirse orgullosas, llegar a una edad avanzada debe verse como un privilegio, sin embargo, hay cosas que deberían de empezar a dejar de hacer y hoy te diremos en qué momento debe dejar de manejar una persona mayor según Harvard.
Conforme pasan los años los reflejos y otras capacidades se van perdiendo y el manejar requiere de reflejos, concentración y una buena vista, por lo que cuando ya no se tienen estas capacidades es mejor dejar de manejar.
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¿En qué momento debe de dejar de manejar una persona mayor según Harvard?
Harvard señala que a medida que las personas envejecen, las habilidades de conducción pueden disminuir tan lentamente que no es obvio que se estén produciendo cambios preocupantes.
Existen señales de alerta que pueden significar que una persona mayor es un conductor inseguro y son las siguientes:
- Comentarios preocupados de familiares o amigos
- El que las demás personas no quieran viajar con ellos
- Que otros conductores toquen su bocina frecuentemente cuando una persona va manejando
- Que reciben constantes multas de tránsito
- Perderse por caminos conocidos
- Conducir constantemente demasiado lento o demasiado rápido
- Abolladuras o arañazos inexplicables que aparecen en el coche
- Accidentes frecuentes o casi accidentes.
¿Por qué disminuyen las habilidades al conducir conforme pasan los años?
Aunque muchas personas de edad avanzada pueden conducir de manera segura las habilidades de conducción pueden disminuir debido a:
- Afecciones médicas: como artritis, neuropatía o demencia
- Medicamentos: como sedantes o ciertos antidepresivos
- Cambios en el tiempo de reacción relacionados con la edad
- Problemas con la visión o la audición
- Otros cambios físicos relacionados con el envejecimiento, como menos flexibilidad o fuerza
- Dificultad para procesar información que cambia rápidamente. Por ejemplo, un conductor mayor puede ser más propenso que un conductor más joven a presionar accidentalmente el pedal del acelerador en lugar del freno cuando necesita detenerse repentinamente.
Aunque para las personas mayores no es fácil aceptar el hecho de que ya no deben manejar, es importante tener una conversación en la que se les explique por qué ya no deben de hacerlo y esto tiene porqué hacerlos sentir mal ni incómodos, ya que la única intención es cuidar su bienestar.
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