A medida que las personas envejecen experimentan cambios que afectan directamente la forma como su cuerpo absorbe los nutrientes, pues hay una reducción del metabolismo, pérdida de masa muscular, alteraciones en la absorción de nutrientes, falta de apetito y la presencia de enfermedades crónicas.
Estos factores hacen las que personas adultas mayores sean más vulnerables a las deficiencias nutricionales y a las alteraciones del estado de nutrición por el exceso o déficit de los macronutrientes, como los hidratos de carbono, las proteínas y los lípidos, detalla el Consejo Nacional de Humanidades de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (CONAHCYT).
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Actualmente, entre el 30.3 y 50% de las personas adultos mayores de México presentan riesgo de desnutrición, problema que está fuertemente asociado con un mayor riesgo de desarrollar enfermedades como la sarcopenia (pérdida de masa y fuerza muscular), lo que propicia hospitalizaciones, un mayor riesgo de infecciones y mortalidad en este grupo etario.
Problemas de nutrición en personas adultas mayores
El riesgo de desnutrición en personas adultas mayores a menudo se relaciona con un bajo consumo de alimentos que aporten macronutrientes. A esto se le suman diversos factores socioeconómicos, funcionales y de salud que contribuyen a su desarrollo. En este sentido, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut), las personas adultas mayores de nuestro país tienen una ingesta precaria de alimentos que son ricos en hierro y en vitaminas del complejo B, lo que puede contribuir a tener niveles bajos de hemoglobina sérica.
La mal nutrición en personas adultas mayores puede ser la causante de otras patologías o complicaciones; el desarrollo de enfermedades preexistentes y un mayor consumo de medicamentos, lo que también puede dar como resultado problemas de memoria, retención de líquidos o deshidratación, debilidad muscular y anemia, detalla Aprende Institute.
Nutrientes clave para las personas adultas mayores que deben considerarse
Las personas adultas mayores requieren de una mayor cantidad de proteínas dietarias, a comparación de los adultos jóvenes, debido a la resistencia anabólica y a la síntesis proteica. En general es recomendable una mayor cantidad de proteínas dietarias por kilogramo de peso corporal. Además, estas deben administrarse de manera homogénea en los tres tiempos de comida obligatorios de estas personas.
Además de esto, los adultos mayores requieren una mayor cantidad de proteínas, como calcio, hierro, vitamina B12, C y D. La mayoría de los alimentos de origen animal como las carnes y los lácteos las contienen. En caso de querer tener una dieta rica en nutrientes para su familiar, es necesario acudir con un especialista que diseñe una dieta apropiada.
(Con información de CONAHCYT, Aprende Institute, Secretaria de Salud).