Maylestela Mora, una arquitecta retirada y actualmente ama de casa, es una mujer que a sus 64 años disfruta de la llegada de las festividades decembrinas, pues estas no solo le gustan, sino que también la llenan de bastante emoción y felicidad, especialmente cuando de la cena navideña se habla. Aunque al mismo tiempo experimenta procupación por su salud, al vivir con diabetes e hipertensión.
Madre de tres hijos, y una fan fiel de los postres y platillos navideños, indica que lo que más disfruta de estos tiempos, además de pasar tiempo de calidad con sus seres queridos, es degustar la comida propia de la cena de Navidad; pues explica que esta le resulta muy agradable, e incluso le recuerda a su infancia.
Te podría interesar
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp con un click aquí.
Para Maylestela, la cena de Navidad no es solo un deleite al paladar, sino también para sus emociones y recuerdos. Sin embargo, desde hace 5 años la felicidad y emoción no es lo único que experimenta con la llegada de estas fechas: también lo es la preocupación de que su salud pueda verse afectada.
Al igual que otros 12.4 millones de personas en México, Maylestela fue diagnosticada con diabetes mellitus tipo 2 en el 2018, y posteriormente con hipertensión hace 2 años, uniéndose así a los más de 30 millones de pacientes con esta condición en nuestro país.
La diabetes y la hipertensión, ¿obstáculos para disfrutar la cena de Navidad?
El doctor Luis Enrique Alcalá, residente de Medicina Interna en el Hospital Centro Médico Nacional de Occidente del IMSS, en Guadalajara, Jalisco, explica que la diabetes y la hipertensión son consideras enfermedades crónico degenerativas, es decir, enfermedades que no son curables y pueden dañar al organismo con el tiempo.
El Dr. Alcalá también informó que estas enfermedades se asocian a otros problemas de salud, como complicaciones cardíacas, renales, riesgos de amputación de extremidades y problemas de la vista, por lo que atenderlas y tratarlas adecuadamente resulta vital. Una parte fundamental del tratamiento y atención a la diabetes e/o hipertensión es, sin duda, la alimentación. La cual debe ajustarse a las necesidades y objetivos de las personas, llegando incluso a tener restricciones considerables.
La arquitecta Mora explica que su principal queja en la cena de Navidad tiene que ver con el hecho que por su propia salud no puede (ni debe) consumir lo que anteriormente disfrutaba, por lo que postres, bebidas y platillos en general deben consumirse limitada o nulamente.
“Siempre de alguna forma se siente uno un poco limitado. Yo no me siento libre de comer todo lo que yo quisiera, todos los antojos.“, comentó a SuMédico la arquitecta Maylestela Mora.
Estos alimentos no deben estar en la cena navideña
Una de las cosas más importantes para los pacientes con diabetes e/o hipertensión, dicen expertos, tiene qué ver con la alimentación. Pero, ¿qué pasa con la cena de Navidad?
Diana Laura Moreno Jiménez, estudiante de séptimo semestre de la Licenciatura de Nutrición y Ciencias de los Alimentos de la Universidad ITESO, explica que durante la cena navideña, los pacientes con diabetes e hipertensión deben considerar hacer algunos ajustes que deben hacer a su dieta, incluyendo algunas restricciones.
Para comenzar, aclara que aunque tener diabetes o hipertensión no significa ya no comer lo mismo que todos en la cena navideña, sí es necesario prestar atención a las cantidades o porciones que se ingieren.
Eso sí, informa que aunque la moderación es de lo más útil, sí existen algunos alimentos que deben estar fuera de la mesa durante la cena de Navidad de las personas con diabetes o hipertensión:
- Alimentos con grandes cantidades de azúcares, incluyendo postres (pasteles, chocolates, galletas, etc).
- Preparados fritos, es mejor elegir opciones horneadas o asadas.
- Alimentos con alto contenido de grasas, principalmente de origen animal (mantequilla, manteca, carnes grasosas).
- Bebidas como refrescos o jugos.
- Alimentos con gran cantidades de harinas.
- Embutidos (carnes frías, jamón, salchichas), ya que tienen alto contenido de sodio y grasas saturadas.
- Bebidas alcohólicas.
- Aderezos.
- Frutas con alto índice glucémico (azúcares), como dátiles o sandía.
“Podemos disfrutar los mismos platillos que los demás, siempre siendo conscientes y cuidando que nuestro consumo sea adecuado para nuestras necesidades.”, explicó Diana Laura en entrevista a SuMédico.
No solo hay que cuidar lo que se come en la cena navideña
El Dr. Luis Enrique Alcalá, agregó que durante la cena navideña es muy importante que los pacientes con uno o ambos padecimientos no solo se centren en lo que comen, sino también en otros detalles que ayudarán a cuidar su salud.
En palabras del médico, es sumamente vital que los pacientes con diabetes o hipertensión sigan con sus medicamentos, su plan alimenticio, y su rutina de ejercicio o actividad física previamente establecidos.
“No se tiene que ser más estricto teniendo en cuenta que con cada paciente se debe personalizar la terapia, algunas veces se puede ser un poco permisivo, sin embargo todo debe ser con previa autorización médica”, explicó el doctor Luis Enrique Alcalá en entrevista.
Además, el doctor Luis Enrique informó que es muy importante que antes y durante la cena de Navidad, los pacientes también tengan un mayor chequeo de glucosa en casa (con un glucómetro en casa), y que se mantengan alertas a signos y síntomas de alarma.
No todo son restricciones en la cena de Navidad, ¿qué alimentos comer?
Tanto Alcalá como Moreno, informan que algo que debe tenerse muy en cuenta durante esta cena de Navidad, es el balance entre grupos alimentarios; es decir, buscar un equilibrio entre la cantidad de carbohidratos, proteínas, grasas, vitaminas y minerales que se consumen.
"Trato de a veces darme un gustito, intentando de que no sea tanta la cantidad de lo que coma yo, buscando balancear con otros alimentos que sean más sanos. Tomando los medicamentos y tratando de no excederme, creo que uno puede disfrutar de estas fiestas.” dijo Maylestela Mora.
Eso sí, según la estudiante la Universidad ITESO, Diana Moreno, existen algunos alimentos que pueden ser ideales para que los pacientes con diabetes e hipertensión puedan consumirlos durante la cena navideña.
- Guarniciones con poco sodio, como ensaladas, espárragos al vapor, verduras asadas, puré de camote o papa, por ejemplo.
- Carnes magras y sin piel, como la pechuga de pollo, el pescado.
- Incluir variedad de alimentos.
- Salsas caseras u opciones más saludables, como la tzatziki, que es a base de yogurt griego.
- Platillos cocinados al horno o al vapor.
- Bebidas con poca azúcar como té, agua fresca (sin azúcar) o agua mineral.
- Postres que no contengan grasas o azúcares, o cuyas cantidades sean menores.
- Verduras asadas o al vapor, como espárragos, calabacitas, betabel, pimientos, brócoli, chayote, etc.
- Grasas saludables como aceite de oliva, aguacate, nueces, almendras, linaza, semilla de girasol.
- Leguminosas como garbanzos, lentejas o frijoles (el hummus de garbanzo o sopas de lenteja son buenas opciones).
- Harinas integrales o de grano entero.
Ten cuidado con estas señales durante la cena de Navidad
Principalmente en pacientes con diabetes, relata el doctor Alcalá, suele ocurrir (e incluso se espera) y es compresible que en la cena navideña o días cercanos se pierda un poco el control: hay mala adherencia al tratamiento y cambios en la dieta (mayor consumo de carbohidratos y grasas).
Por esta razón, además de que los pacientes deben estar muy conscientes de que cualquier acción puede tener repercusiones, es necesario que se tenga especial atención no solo a los valores de presión y de azúcar, sino a cualquier señal de alarma que podrían indicar un problema con su hipertensión o diabetes:
- Mareo.
- Náuseas y/o vómito.
- Debilidad.
- Sensación de desvanecerse.
- Cambios en la vista.
- Dolor de cabeza.
- Sudoración.
- Cambios en el estado de alerta.
Si alguno de estos síntomas se presenta, es muy importante que los pacientes revisen sus signos vitales, la presión arterial, sus niveles de glucosa y de saturación de oxígeno.
“En caso de que su glucosa baje se debe comer algo dulce, si no responde se debe ir a un servicio de urgencias. En caso de presión arterial baja, se debe comenzar a hidratar y acudir a urgencias, igualmente si la presión se eleva”, aseguró el médico.
Para enterarte de toda la información que necesitas sobre salud y bienestar síguenos en Facebook y TikTok.