¿Tu trapeador está muy sucio, tiene malos olores y no sabes qué hacer para que huelan bien? Tranquilo y tranquila, existen trucos muy efectivos que te pueden ayudar a eliminar la suciedad y los malos olores para que quede impecable.
Para garantizar que tu casa quede limpia es necesario que también los instrumentos que empleas estén en buenas condiciones pues, si usamos utensilios sucios y con mal olor, es probable que este se impregne en las superficies que supuestamente limpias, dejándolas aún más sucias. A continuación, te compartimos un truco para lograrlo. ¡Toma nota!
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Truco para limpiar el trapeador y dejarlo impecable
Para dejar el trapeador impecable y sin malos olores fácilmente, te recomendamos tomar las siguientes medidas:
Para limpiar tu trapeador, necesitas realizar una mezcla con productos caseros. De acuerdo con Enséñame de Ciencia, debes agregar agua tibia o caliente en una cubeta y una taza de vinagre blanco; media taza de bicarbonato de sodio, una cucharada de jabón de trastes y el jugo de dos o tres limones junto con la cáscara. Después, mezcla los ingredientes hasta que obtengas una solución homogénea y deja reposar la mezcla.
Una vez que hayas realizado la mezcla introduce el trapeador en la cubeta y déjalo remojar durante toda una noche. En caso de que uses jergas, déjalas de igual modo remojar en distintas cubetas para que sea mucho más sencillo lavarlas y quitarles los malos olores.
A la mañana siguiente retira el trapeador o jergas del remojo y frota la superficie en el lavadero para eliminar toda la suciedad. Te darás cuenta de que el remojo será muy efectivo para remover la suciedad y los malos olores puesto que le permite a las fibras de la tela desprenderse de todas las cosas que tiene impregnadas. Exprime bien el trapeador o jergas y tiéndelas al sol.
En caso de que el primer tratamiento no haya sido tan efectivo, después de enjuagar tu trapeador, prepara una mezcla de una tapita de cloro por un litro de agua o, en su defecto, un chorrito de vinagre y déjalo remojando durante un par de horas. Una vez que haya pasado el tiempo, retíralo enjuaga con abundante agua. Puedes repetir este paso las veces que sean necesarias, detalla Cocina Vital.
(Con información de Cocina Vital, Enseñane de ciencia).