“Me mutilaron el clítoris en nombre de la normalidad”: persona intersex

En una carpeta verde con el nombre “Candelaria. Salud” estaba un acta de nacimiento con la misma fecha de Candelaria Schamun, pero con un nombre distinto: Esteban Schamun. Esteban estaba registrado como un varón sin testículos descendidos. Tras revisar los diversos papeles, Candelaria Schamun entendió que ella había sido Esteban, pero ese registro la llevaría a ser sometida a 4 operaciones sólo por fines estéticos, sólo por ser una persona intersex, reporta BBC Mundo.

"Me mutilaron el clítoris en nombre de la normalidad. No había ninguna necesidad médica de hacerlo, cortaron para que no tuviera la apariencia de un pene", menciona Candelaria Schamun.

Las operaciones provinieron porque especialistas detectaron que la hipersecreción de andrógenos había producido en Candelaria Schamun un clítoris superdesarrollado, es decir, la aparición de caracteres sexuales masculinos externos que no contradecían la existencia de genitales internos femeninos. Las operaciones invasivas e irreversibles sólo provocaron en Candelaria Schamun la mutilación de su clítoris.

¿Qué es una persona intersexual?

De acuerdo con Planned Parenthood, la intersexualidad es un término usado para definir a todas las personas que nacen con órganos reproductivos o sexuales que no se ajustan a lo que tradicionalmente se considera “masculino” o “femenino”. En algunas ocasiones, cuando nace unx bebe intersexual, especialistas le hacen cirugías para que su cuerpo coincida con las ideas binarias que se tienen de lo que es el sexo “masculino” y “femenino”.

El portal añade que ser intersexual sólo quiere decir que una persona nació con una variación que ocurre de manera natural en los seres humanos. A pesar de la creencia, la intersexualidad no es un problema médico por lo cual las intervenciones médicas no son necesarias por razones médicas.

“A los 3 meses de vida me practicaron la primera intervención. Entré al quirófano en brazos de mi mamá, ella me colocó la mascarilla de la anestesia. Para que el tamaño del clítoris se adecuara a los estándares de "normalidad médica" me lo mutilaron", detalla Candelaria Schamun.

Posteriormente a los 9 meses Candelaria Schamun recibió su segunda operación: una vaginoplastia. A los 12 años regresó para que le realizaran un abocamiento para conectar el exterior con el interior. En esa intervención detectaron que tenía ovarios, útero y trompas de Falopio. La última operación fue a los 17 años donde buscaron independizar la vagina de la uretra y reparar los daños de la cirugía anterior.

Entre las consecuencias de las operaciones fueron la destrucción de las terminales nerviosas del clítoris, órgano encargado de generar placer. Secuelas que aún sigo padeciendo. En la segunda operación atravesó un cuadro de incontinencia urinaria. Durante cinco años tosía y se orinaba. Tras conocer su historia, Candelaria Schamun tuvo problemas con el consumo de alcohol y se apartó de su mamá, su familiar cercano. Se sentía sucia. El contar su historia y conocer a otras personas intersexuales ahora le hacen ver que su historia debe ser escuchada.

“Escribir este libro, poner en palabras "Ese que fui", alivió mi vida y la de toda mi familia. Me gustaría que se edite en otros países, en otros idiomas, puede ayudar a muchas personas”

El Gobierno de Argentina destaca que hablar de las personas intersex, visibilizarlas y conocerlas permite eliminar el desconocimiento, la discriminación y las violencias. Además, favorece el desarrollo de una identidad de género y una imagen corporal saludables, evitando el sufrimiento personal y el de sus familias. Una manera de hacerlo es evitar el uso del término hermafrodita, sino intersexual, personas intersexuales, variación intersexual y/o rasgos intersexuales.

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