La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) explica que la diversidad sexual hace referencia a todas las posibilidades que tienen las personas de expresar y vivir su sexualidad, así como de asumir expresiones, orientaciones y preferencias; identidades sexuales y de género diversas.
Hablar de este tema a infancias y adolescencias es importante para lograr comprensión, aceptación y apoyo para las personas que pertenecen a la comunidad LGBTTTI+ dentro y fuera del núcleo familiar.
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Expertos en psicología clínica recomiendan abordar estos temas desde un punto de vista educativo para la vida diaria, de acuerdo con la edad de las infancias y adolescencias, dado que la información correcta transmitida con palabras idóneas produce entendimiento, cariño y confianza por parte de los menores de edad hacia sus padres.
“Es un tema clave en la educación sexual de los hijos. Debe empezar desde una edad temprana y adecuarse al nivel de entendimiento de los niños y adolescentes. Lamentablemente, no todos los padres de familia tienen información, ni se sienten cómodos hablando del tema”, advirtió la psicóloga Mariana Martínez Guillén, directora general de Tu Mente Sana (TMS), clínica especializada en salud mental.
Conocer sobre diversidad sexual e identidad de género le permite a las infancias y adolescencias ser autónomas
De acuerdo con TMS, recibir educación integral sobre la diversidad sexualidad contribuye al desarrollo de habilidades para ejercer nuestros derechos reproductivos y tomar decisiones autónomas, informadas y responsables sobre este aspecto de la vida.
En México, 5.0 millones de personas de 15 años o más edad se autoidentifican con una orientación sexual e identidad de género LGBTTTI+. Por su orientación sexual, 2.3 millones son bisexuales; 1.2 millones son homosexuales y 489,835 lesbianas, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Reconocer y asumir que existen estas diversidades y educar a partir de su existencia es importante para que las infancias y adolescencias crezcan libres de prejuicios y estigmas. Por tales motivos, las clínicas Tu Mente Sana y Rhino Morado, espacio de contención y acompañamiento fundamentado en derechos humanos y terapia afirmativa para la comunidad LGBTTTI+, recomiendan las siguientes pautas para hablar de identidad de género y orientación sexual en familia:
- Informarse. Los padres de familia deben informarse y entender los conceptos de identidad de género y orientación sexual antes de hablar con sus infancias y adolescencias
- Buscar un espacio seguro. Se puede motivar la conversación en un ambiente cómodo
- Fomentar la charla. Hay que hacer saber a los infantes que pueden preguntar y que nada es inapropiado, vergonzoso o fuera de lugar
- Utilizar un lenguaje apropiado. Se aconseja usar un lenguaje adecuado a la edad y desarrollo cognitivo de cada infante, sin usar palabras peyorativas o prejuiciosas
- Impulsar la empatía. Hay que explicar a las infancias y jóvenes que todas las personas son diferentes y que eso es algo positivo
- Ser respetuoso y dar soporte. Cuando un hijo comparte su orientación sexual o identidad de género hay que hacerle sentir acompañado, entendido seguro y en confianza, y por ningún motivo invalidar lo que siente y expresa
“Es importante que los padres de familia busquen orientación profesional para apoyar a sus hijos a reconocer y manejar su identidad de género/orientación sexual. Hacerlo a tiempo puede evitar trastornos como la depresión y ansiedad en la persona, así como conflictos familiares por falta de entendimiento”, añadió Martínez Guillén en un comunicado.
(Con información de CNDH, INEGI, Tu Mnete Sana).