IRRIGADOR DENTAL

¿Qué tan bueno es un irrigador dental? Conoce sus pros y contras

Mantener una higiene dental es necesario para el bienestar. Conoce cómo puede ayudarte o no un irrigador dental

¿Planeas ocupar un irrigador dental? Toma estos puntos en cuenta.
¿Planeas ocupar un irrigador dental? Toma estos puntos en cuenta.Créditos: Canva
Escrito en VIDA SANA el

Cuidar nuestra salud es uno de los propósitos de año nuevo más comunes. Desde la salud física hasta la salud mental, podemos pensar en una serie de actividades que nos ayudarán a tener un estado sin malestares. Probablemente pensemos lograrlo a través de una alimentación saludable, una hidratación continúa o realizar ejercicio. ¿Existe otra actividad que podamos añadir? Sí y se trata de cuidar la higiene dental mediante diversos productos, como un irrigador dental.

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Después de ingerir alimentos, solemos recurrir a la pasta, el cepillo y el hilo dental para quitar de los dientes las bacterias, los restos de comida y cualquier otro elemento que nos impida lucir una gran sonrisa. Sin embargo, existen zonas de la boca que es complicado llegar, provocando que nos tardemos más tiempo o lleguemos a lastimarnos. ¿Cómo arreglar esto? Con un irrigador dental.

Un irrigador dental es un producto que promete llegar a esas zonas donde el cepillo, el agua y la vista no llegan. ¿Qué otros beneficios busca dejar el irrigador dental? ¿Cómo saber que debemos adquirir un irrigador dental? ¿Es para todas las personas el irrigador dental? Continúa leyendo esta nota para conocer más y seguir cuidando tu higiene dental.

¿Qué es un irrigador bucal y para qué sirve?

De acuerdo con Ruano Policlínica Dental, el irrigador dental, es una herramienta que expulsa agua a presión y sirve para realizar una limpieza profunda en la boca. Debido a que se utiliza un chorro de agua a presión, accede a zonas donde el cepillo no puede llegar, como zonas interdentales, puentes o implantes dentales. El irrigador dental es utilizado como complemento de la higiene dental.

Créditos: Canva

Centro Odontológico Avanzado menciona que cualquier persona puede usar un irrigador dental, sin embargo, existen personas a las cuales se aconseja su uso. Esto incluye aquellas que están predispuestas a tener caries de forma frecuente, viven con enfermedad periodontal o necesitan una higiene dental más completa. Esto último aplica para quienes tienen implantes, coronas o brackets que dificultan la limpieza en profundadas. Incluso para personas con alguna discapacidad en movilidad.

Un producto que también ayuda a llegar a zonas poco visibles es el hilo dental, pues es capaz de limpiar esos espacios estrechos entre los dientes y eliminar la placa. Mayo Clinic explica que si una persona utiliza hilo dental sin tener sangrados u otros problemas, no es necesario cambiar a un irrigador dental. En caso de tener molestias, puede cambiar el producto, evitando compartirlo con otra persona.

Entre los beneficios que existen del irrigador dental está disminuir la posibilidad de inflamación de encías, prevenir la formación de sarro, reducir el mal aliento y no requerir demasiada destreza manual para su manipulación, detalla MejorconSalud. Entre sus tipos están los de cable, inalámbrico, pilas, ducha, grifo y para niños. Para utilizarlo, se hace de la siguiente manera:

  • Primero cepillar los dientes de manera habitual y usar hilo dental para llegar a ciertas zonas
  • Elegir la boquilla que mejor se adapte a tu boca
  • Ajustar la presión de agua que resulte más conveniente
  • Introducir el cabezal a la boca y pasar el irrigador por todos los dientes, activando el botón disparador en la zona donde quieras limpiar
Créditos: Canva

Ahora que conoces sobre el irrigador dental, puedes tomar la mejor decisión para tu higiene dental. Recuerda que para mantener una higiene dental también puedes llevar las siguientes prácticas que enlista el Instituto Nacional de Investigación Dental y Craneofacial:

  • Cepillarse los dientes dos veces al día con pasta de dientes con flúor
  • Limpiar entre los dientes con regularidad para eliminar la placa
  • Visitar al dentista para chequeos de rutina y limpieza profesional
  • Evitar fumar
  • Llevar una alimentación balanceada con un control en dulces y bebidas azucaradas
  • En caso de planear un embarazo, realizarse un chequeo dental debido a los cambios hormonales

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