Las personas que viven en lugares cercanos o en zonas verdes y azules tienen menos estrés y a continuación te decimos a qué se debe esto y por qué deberías considerar vivir en un lugar así.
Las zonas verdes y azules pueden incluir parques públicos, jardines comunitarios, cementerios y cuerpos de agua y en estos lugares las personas tienen menos estrés.
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Vivir en espacios verdes y azules están vinculados a menos estrés, ¿por qué?
Un estudio publicado en la reunión anual de la Academia Americana de Neurología señala que los adultos mayores en las ciudades tienen un menor riesgo de angustia psicológica grave, y posibilidad de sufrir deterioro cognitivo posterior y demencia, cuando viven cerca de los espacios verdes y azules.
Adithya Vegaraju, líder del estudio, analizó los datos del Sistema de Vigilancia de Factores de Riesgo del Comportamiento del Estado de Washington para evaluar la prevalencia de angustia psicológica grave entre 42 mil 980 residentes del estado de Washington de 65 años o más.
Los datos, recopilados entre 2011 y 2019, utilizaron un cuestionario autoinformado para determinar la angustia psicológica grave, que se define como un nivel de angustia mental considerado lo suficientemente debilitante como para justificar el tratamiento.
Vegaraju y Solmaz Amiri, coautor del estudio, utilizaron códigos postales, junto con datos del censo de los Estados Unidos, para aproximar la proximidad de los adultos urbanos a espacios verdes y azules.
Tras controlar los posibles factores de confusión de edad, sexo, etnia, educación y estado civil, los investigadores encontraron que las personas que vivían a menos de un kilómetro de espacios verdes o azules tenían un riesgo un 17% más bajo de experimentar angustia psicológica grave, en comparación con las personas que vivían más lejos de esos espacios.
¿La angustia psicológica puede causar demencia?
La angustia psicológica en adultos se ha relacionado en estudios longitudinales basados en la población con el deterioro cognitivo posterior y la demencia.
Un estudio en adultos mayores encontró que el riesgo de demencia es más del 50% mayor entre los adultos de 50 a 70 años con depresión persistente.
Los espacios azules y verdes también se han investigado en relación con las enfermedades neurodegenerativas entre los adultos mayores; un estudio de 2022 que analizó datos de unos 62 millones de beneficiarios de Medicare encontró que aquellos que vivían en áreas con más vegetación tenían un menor riesgo de hospitalizaciones por enfermedad de Alzheimer y demencias relacionadas.
"Nuestra esperanza es que este estudio que muestra una mejor salud mental entre las personas que viven cerca de parques y agua desencadene otros estudios sobre cómo funcionan estos beneficios y si esta proximidad puede ayudar a prevenir o retrasar el deterioro cognitivo leve y la demencia".
(Con información de: Medscape y La Academia Americana de Neurología)