Después de un día con estrés, tráfico, actividades diversas y bostezos interminables, buscamos llegar a nuestro hogar para descansar el cuerpo y la mente, relajándonos en el calor de las sábanas y la comodidad de las almohadas. Cerrar los ojos, soñar con una aventura emocionante y despertar con toda la energía es nuestra aspiración, pero nos encontramos con vueltas por toda la cama, ojos despiertos y un hartazgo en la mente. Una vez más, otra noche en la cual no podemos dormir.
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De acuerdo con DGCS UNAM, una persona duerme alrededor de un tercio de su vida, esto demuestra la relevancia del descanso. En el mundo 1 de cada 3 personas padece algún trastorno de sueño. En México, 75% de la población acude a clínica de sueño por ronquidos o apnea de sueño, mientras el 25% asiste por insomnio, somnolencia diurna y otros trastornos del sueño.
Ante la dificultad para dormir o mantener el sueño, las personas recurren a las pastillas para dormir. Tal como su nombre lo indica, permiten a la persona lograr el descanso que por sí solas no pueden generar. Aunque pareciera que las pastillas para dormir solucionan el problema, bajo un uso desmedido, pueden provocar otros problemas de salud. Hoy en esta nota te compartimos lo que debes saber de los usos y riesgos de las pastillas para dormir.
¿Cómo utilizar las pastillas para dormir?
De acuerdo con la Clínica Universidad de Navarra, los trastornos de sueño no son una patología grave por sí misma, pero tiene diversas implicaciones en la vida diaria, como agotamiento físico, bajo rendimiento, sueño diurno, dificultad para cumplir con las obligaciones, entre otras actividades. Los trastornos de sueño incluyen insomnio, hipersomnia, narcolepsia, ronquido, apnea, parasomnias, etc.
Según Mayo Clinic, las pastillas para dormir de venta bajo receta médica pueden permitir conciliar el sueño con más facilidad, mantenerte dormido durante más tiempo o ambas cosas. Los riesgos y beneficios varean conforme los distintos medicamentos con receta médica para dormir. Antes de utilizar pastillas para dormir, el portal de salud recomienda las siguientes acciones al acudir con un especialista:
- Realizar preguntas para obtener una idea sobre el patrón de sueño
- Solicitar pruebas para descartas afecciones subyacentes que podrían provocar las dificultades para dormir
- Debatir sobre las opciones para tomar medicamentos, como presentación, frecuencia y momento de tomarlos
- Usar las pastillas para dormir en un periodo limitado para determinas beneficios y efectos secundarios
- Hacer pruebas con otras pastillas para dormir en caso de que no funcionen tras completar el tratamiento
“El uso ideal de estos medicamentos es sólo cuando sea necesario, por lo que yo diría de dos a tres veces por semana, limitado a un período corto de tiempo”, menciona Alcibíades Rodríguez, especialista en medicina del sueño para The New York Times.
El medio estadounidense añade que el uso prolongado de medicamentos puede conllevar un riesgo de sufrir problemas de memoria, confusión y estreñimiento, teniendo repercusiones en personas mayores. Algunas investigaciones sugieren que podría asociarse con un mayor riesgo de demencia, pero no es un vínculo definitivo. Aparte de ello, deben tomar en cuenta sus efectos secundarios, como mareos, dolores de cabeza, depresión, respiración lenta y problemas gastrointestinales.
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