La piel del rostro es muy delicada y factores como el estrés, el maquillaje, la exposición constante al sol o la contaminación, pueden darnos un aspecto cansado o hasta de mayor edad. Afortunadamente, existen técnicas para mejorar el aspecto de la piel del rostro, como el masaje facial japonés. Te decimos cómo hacerlo.
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El masaje facial japonés, conocido como kobido, es una técnica diseñada para estirar la piel del rostro de forma natural y estimular la circulación sanguínea, lo que favorece un aspecto más luminoso y joven.
El portal Mejor con Salud señala que este masaje tiene muchos beneficios para el rostro, principalmente porque al realizarlo se estimulan 16 músculos faciales y del cuello, gracias a movimientos suaves y rítmicos.
Lo ideal es que se realice durante entre 50 y 90 minutos y para obtener los mejores resultados, se recomienda que lo realice un especialista en masajes, sin embargo también puedes hacerlo tú mismo en casa.
¿Cómo se debe realizar el masaje facial japonés?
El masaje facial japonés debe realizarse con movimientos ascendentes, es decir, de abajo hacia arriba, comenzando en la zona del cuello y finalizando en la frente. Se comienza con movimientos envolventes del cuello y hasta la mandíbula, luego enfocándose en la zona superior de la boca.
Luego, hay que subir a la zona del tabique nasal y ejercer una ligera presión con el dedo medio, incluyendo también las cavidades alrededor de las fosas nasales.
Es importante que en todo momento los movimientos del masaje facial japonés se hagan de forma suave y rítmica. Al terminar con la zona de la nariz, se debe subir alrededor de ojos, en las cuencas y en la parte donde tenemos las famosas patas de gallo.
Luego haz un poco de presión entre las cejas y realiza toques enérgicos con las yemas de los dedos en todo el rostro. Para terminar, se deben colocar las palmas de las manos sobre los ojos de forma suave.
Es ideal hacer este masaje de forma constante, o completar al menos 10 sesiones para ver resultados favorables, como:
- Músculos faciales tonificados, que son resultado de los movimientos repetitivos que generan contracciones y relajación de fibras, dando un aspecto más joven de la piel.
- Zona facial relajada, ya que el masaje alivia la tensión muscular y la rigidez asociada a los altos niveles de estrés. Este efecto relajante favorece que tu piel se vea más saludable y luminosa, además de que tu salud mental también se verá beneficiada.
- Piel preparada para otros tratamientos, esto en caso de que desees aplicar algún producto dermatológico especializado y quieras los mejores resultados, ya que la piel se vuelve más receptiva.
Puedes complementar este masaje con velas aromáticas, una música relajante o hacerlo simplemente en silencio para relajarte al máximo y obtener los mejores beneficios.
Consejos para una piel del rostro más sana
No es necesario gastar en productos de skincare muy caros para tener una piel del rostro envidiable, de acuerdo con expertos de Mayo Clinic es suficiente seguir algunos conceptos básicos del cuidado de la piel y un estilo de vida saludable, factores que retrasan el envejecimiento y previenen problemas dermatológicos. Comienza con estos cambios:
- Siempre que salgas al exterior usa protector solar de amplio espectro, ya que la exposición al sol puede provocar arrugas prematuras, manchas de edad y mayor riesgo de cáncer de piel.
- Prefiere estar en lugares con sombra o usa un sombrero y ropa que cubra tus piernas y brazos si es necesario estar al sol.
- Evita los rayos solares entre las 10 am y las 4 pm, ya que es cuando son más intensos y dañinos para tu piel.
- No fumes, el tabaco le da a la piel un aspecto envejecido y contribuye a la formación de arrugas.
- Limita la duración del baño y procura usar agua tibia en lugar de muy caliente.
- Evita los jabones fuertes o con aromas muy intensos, ya que pueden eliminar los aceites naturales de la piel. Mejor usa un jabón neutro o limpiadores suaves.
- Después de bañarte o lavar tu cara, sécate con toquecitos suaves y no restregando la toalla muy fuerte para no irritar la piel.
- Usa crema humectante ideal para tu tipo de piel y de preferencia con factor de protección solar.
- Come muchas frutas, verduras, granos integrales y proteínas magras. No te olvides de hidratarte bien todos los días con agua natural.
- Controla el estrés para evitar problemas de la piel como brotes de acné o dermatitis.
Ya lo sabes, puedes empezar a cuidar la piel del rostro con un masaje facial japonés de forma constante y los cuidados que se requieren para evitar el envejecimiento prematuro o el aspecto cansado.
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