Una infancia y una adolescencia deben ser etapas donde las personas aprendan nuevos conocimientos, se conozcan a sí mismos, exploren nuevos lugares, adquieran individualidad y puedan tener un desarrollo saludable. Sin embargo, algunas infancias y adolescentes pueden atravesar problemas de salud mental que impacten su vida diaria. Como madres, padres y cuidadores, esto causa preocupación. ¿Cómo poder ayudar a tus hijos? Toma en cuenta estos consejos.
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De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, una de cada seis personas tiene entre 10 y 19 años de edad. La adolescencia es una etapa única y formativa, pero los cambios físicos, emocionales y sociales que se producen en este periodo, incluida la exposición a la pobreza, los malos tratos o la violencia pueden hacer que adolescentes sean vulnerables a problemas de salud.
Cuando un infante o adolescente tiene problemas de salud mental necesita a sus círculos de apoyo, como familiares, amistades y otros seres cercanos. Acompañar desde la escucha, la comunicación o el acompañamiento permitirá al menor de edad sentir que no está solo en el proceso que debe atravesar.
¿Cómo se puede ayudar a un hijo a ser feliz?
1. Anímalo de forma incondicional
Según Eresmamá, un requisito indispensable para ser feliz es obtener amor y seguridad de tu fuente principal de apego. Amar y aceptar a tu hijo tal como es, expresarle tu cariño, escucharlo atentamente y conversar con él te permitirá fortalecer el vínculo e identificar cambios o preocupaciones que viva. Esto no sólo permitirá reducir problemas de salud mental, también permitirá reconocer que cuenta con círculos de apoyo cuando la vida puede tener un grado de dificultad.
2. Pon límites sanos
Eresmamá menciona que las y los hijos necesitan límites claros y coherentes. Permiten a la persona saber qué esperar en su vida y qué espera la vida de ellos. Esto les proporciona seguridad y les enseña a tolerar la frustración. Establecer límites desde la infancia permitirá que adolescentes construyan una salud mental fuerte. Conforme vayan creciendo tomarán decisiones que aborden el cuidado de su bienestar físico y mental.
3. Fomenta su autoestima y autonomía
Eresmamá detalla que el amor propio es uno de los valores más importantes para poder ser feliz. Pon tu esfuerzo en que tu hijo construya una autoestima sana que le haga sentirse capaz y valioso de sí mismo. Desde su infancia encomiéndale pequeñas responsabilidades conforme a sus posibilidades. Cuando logre las cosas forjará en su vida un autoconcepto positivo. La construcción de la autoestima no termina en la niñez, pues durante la adolescencia también podrás acompañar a tu hijo para que valore sus habilidades, capacidades y virtudes que lo hacen ser él mismo.
4. Sé un modelo de actitud positiva
Lamentees maravillosa explica que hijos aprender observando, tomando modelos e imitándolos. Las reacciones que tengas serán decisivos para adoptarse ante ciertos acontecimientos. Trata de mantener una mentalidad flexible y proactiva frente a los problemas. Muéstrale a tu hijo cómo te ocupas en lugar de preocuparte. En salud mental esto significará que por más grande que sea el problema existen soluciones. Más allá de esconder tus emociones es enseñarle que las cosas pueden resolverse.
5. Enséñale estrategias de afrontamiento adecuadas
Lamentees maravillosa finaliza con esta serie de acciones y consejos para apoyar a tu hijo es su salud mental al destacar la relevancia de las estrategias de afrontamiento. Sea buscar soluciones o pedir ayuda, enséñale a tu hijo que no tiene razones para lidiar sus problemas en soledad. Aunque existen ciertas situaciones que deberá tomar control, puede recurrir a sus círculos cercanos por un consejo o un abrazo. Ayúdale a construir una relación sana donde el amor, la empatía y el respeto estén.
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