Pasar tiempo de calidad con mis hijos, seguir divirtiéndome con ellos o aprender nuevas habilidades en familia pueden ser algunos de los propósitos de año nuevo que te pusiste como meta en este inicio. Aunque hayan pasado 15 días de esa promesa, probablemente cuentes con pocas ideas que te permitan alcanzar tus objetivos. ¿Qué actividad puede ser benéfica tanto para ti como para tus hijos y familia? La jardinería.
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La jardinería es una actividad que constantemente vemos en las pantallas grandes donde mujeres mayores pasan sus tardes. Sin embargo, este ha sido un estereotipo que se ha producido, pues cualquier persona puede practicar jardinería. Claro que para que esta actividad prospere, es necesario contar con algunos trucos bajo la manga y una adecuada compañía que permitan disfrutar el tiempo invertido.
La jardinería nos impulsa a dejar por un momento las pantallas de los dispositivos digitales y conocer el ambiente que nos rodea. ¿Qué otros beneficios tiene para las y los niños? Continúa leyendo esta nota y conoce más sobre el mundo que les espera a fuera de su hogar. Poco a poco te darás cuenta que la jardinería será un nuevo espacio para cuidar, acompañar y conocer a tus niños.
¿Qué aprenden los niños al sembrar plantas?
1. Fomenta una alimentación saludable
De acuerdo con Eresmamá, cuando un niño ve cómo se planta un alimento, cómo se cuida o cómo crece, es probable que sienta curiosidad por probar el fruto de su trabajo, animándole a probar alimentos saludables. Esta dinámica puede aplicarse desde recoger junto al niño el alimento, lavarlo y posteriormente comerlo o pedirle su participación para cocinarlo. Esta actividad permitirá que el niño vea a los alimentos como parte de un trabajo y no sólo un producto dentro de un plástico.
2. Mejora el desarrollo de la motricidad fina
Recoger semillas diminutas, arrancar las malas hierbas o cuidar las plantas son algunas actividades donde Eresmamá encuentra el desarrollo de habilidades motoras finas. Cuando las y los niños están creciendo, necesitan de actividades que fomenten el desarrollo de sus capacidades y la obtención de otras. Involucrar la jardinería en la vida diaria le permitirá tener otro acercamiento tanto con el mundo exterior, como con su cuerpo.
3. Aumenta el sentido de responsabilidad
Eresmamá menciona que las plantas requieren mucho cuidado. Cuando una práctica se olvida, como regar o cambiar la tierra, pueden morir o presentar problemas dentro de su crecimiento. Por ello, prestar atención y tener en cuenta las actividades que deben realizarse fomenta la responsabilidad en las y los niños. Les enseña la relevancia de organizarse y llevar a cabo ciertas tareas con el fin de tener resultados. Aprenden este valor a través de la jardinería de una manera didáctica y divertida.
4. Promueve el contacto directo con la naturaleza
Aosom agrega que otro beneficio que se obtiene de la jardinería en niños involucra el contacto con la naturaleza, especialmente en aquellos infantes que viven en ciudades y pocas veces tienen una desconexión del mundo. La jardinería fomenta la exploración al aire libre y sentir las texturas que tiene el mundo. En la jardinería niñas y niños podrán encontrar un espacio para relajarse, gestionar sus emociones y apreciar la vida que les rodea.
5. Estímulo al cuidado
Probablemente tengamos recuerdos de aquel juguete que perdimos, destrozamos o maltratamos. Nuestra ausencia de la noción de cuidado probablemente nos hizo perdernos de atesorar un recuerdo de nuestra infancia. Aosom finaliza esta lista de beneficios de la jardinería en niños al destacar que la jardinería ayuda a desarrollar el cuidado. Un valor fundamental para su salud y crecimiento. Si logramos que las y los niños entiendan la relevancia de cuidar tu salud, en un futuro podrán vivir un estilo de vida saludable.
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