‘El mundo es un pañuelo’ solemos escuchar en las pláticas donde nos encontramos coincidencias que parecieran no ser lógicas, pero están. Sin embargo, cuando reflexionamos sobre cómo es este pañuelo nos damos cuenta que es diverso en cada detalle donde las similitudes representan momentos fuera de este lugar. Tal vez por sus curiosidades, conocimientos y cosas por descubrir los niños entran a la etapa del por qué.
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En la etapa del por qué, niñas y niños potencializan sus capacidades de investigar, conocer, experimentar, comprobar y fallar. Para dar paso a estas fases, constantemente preguntan la razón de las cosas. ¿Por qué el cielo es azul? ¿Por qué hay nubes? ¿Por qué no puedo ir? ¿Por qué te enojas? ¿Por qué no puedes? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué?
La etapa del por qué puede retar a madres y padres a mirar al mundo con otros ojos. Teniendo en la preguntas mente que no se habían hecho y respuestas que no conocían. Aunque es una manera de aprendizaje, también puede ser desesperante ante tanto cuestionamiento. Si tú y tu niño están en esta etapa, estos consejos te ayudarán para controlar la frustración y aprender las incógnitas que este pañuelo aún guarda.
¿Cuándo empieza la etapa del por qué en los niños?
De acuerdo con Enforex, esta etapa suele estar presente entre los 3 y 4 años. En este tiempo, el lenguaje del menos florece y ante la curiosidad que proviene de su observación preguntan a quienes consideran que tienen mayor experiencia en el mundo: las personas mayores. En esta etapa las y los niños no buscan terminar con la paciencia de sus padres, sino tener en la mano hasta la mínima información. Por lo cual, la paciencia es la mejor aliada.
Guía Infantil agrega que la o el niño no busca respuestas con grandes explicaciones, sino necesitan una respuesta conforme a su edad y conocimientos. Cuando no se tienen las respuestas y se preguntan la razón de esto, es recomendable buscar la respuesta juntos y enseñarles que las personas mayores no tienen todo el conocimiento, pero sí herramientas para comprender las respuestas y adaptarlas al lenguaje de cada persona.
El portal añade que la etapa del por qué también puede complicarse porque los niños realizan preguntas en momentos poco oportunas en espacios incómodo. En lugar de regañar al niño por algo que no sabía, deberá enseñarse qué puede preguntar, frente a qué personas puede realizar las preguntas y fomentar su curiosidad. Debe buscarse que el niño no tenga miedo por preguntar o expresar sus inquietudes, pues tiene una persona que le acompañará en el proceso. Eresmamá deja otros consejos:
- No te burles de él o ella: evita ridiculizar al pequeño. Diles aquello que necesitan y guarda alguna situación incómoda como anécdota
- Contesta con naturalidad: responde con sencillez sin tecnicismos o palabras complicadas
- Si no tienes disposición para contestar, manéjalo con paciencia: explícale la razón de tu estado y después pueden conversarlo
- Evita juzgar: más que acaparar tu atención, quieren seguir aprendiendo
- Habla de cualquier tema: prepárate para hablar sobre aquellos temas que en los cuales tienes incomodidad
- Pon a prueba tus destrezas: si crees que conoce algo o puede intuirlo, hazle tú la pregunta
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