Los tatuajes son un medio para expresar sentimientos, pensamientos y momentos que han marcado la vida. Tatuarse es una decisión que requiere tiempo por la durabilidad en el cuerpo y el dolor que puede causar. Aunque para algunas personas es una decisión fácil, en algunos casos, este tema debe pensarse un poco más por los riesgos implicados, como es el caso de los tatuajes durante el embarazo.
Durante el embarazo existen fechas, nombres o símbolos que personas quisieran atesorar toda la vida, por lo cual, pueden pensar en tatuarse para recordarlo toda la vida y llevarlo a todas partes. ¿Es recomendable tatuarse en el embarazo? ¿Qué tomar en cuenta antes de tatuarse? ¿A qué riesgos me puedo enfrentar? Conoce las respuestas en esta nota.
Te podría interesar
Antes de iniciar, recuerda que esta información sirve para cuidar tu bienestar durante tu embarazo. Ante cualquier duda o procedimiento que quieras realizar a tu cuerpo, consúltalo con un especialista para evitar escenarios poco agradables. Si la respuesta recomendada va en contra de tus deseos, recuerda que la paciencia podrá ayudarte a tener una mejor experiencia.
¿Qué pasa si una mujer embarazada se tatúa?
Los tatuajes, informa CuídatePlus, son dibujos, textos o formas de forma permanente en la piel mediante la inyección de tinta u otros pigmentos debajo de la dermis. Aunque tradicionalmente los tatuajes eran realizados de forma manual mediante agujas e inyección, el método más frecuente es el uso de máquinas especiales que permite un proceso rápido y eficaz.
Antes de realizarte un tatuaje, explica Iris, se recomienda a las personas beber bastante agua, tener una alimentación saludable, abstenerse de sustancias anticoagulantes para limitar el sangrado durante la sesión, no afeitar la zona de tatuar, relajar el cuerpo para tener una mejor experiencia y llevar a cabo los cuidados tras realizar el tatuaje, como humectación, lavado y cuidado del sol.
Durante el embarazo, detalla Eresmamá, lo recomendable es no realizarse tatuajes debido a distensión, retracción cutánea y el riesgo de infección asociado al procedimiento. Aunque no existe un riesgo directo del embarazo, lo más recomendable es esperarse hasta después del parto para minimizar el riesgo de exposición a agujas contaminadas y tintas de baja calidad. Si a pesar de los riesgos, consideras tatuarte en tu embarazo, Eresmamá aconseja:
- Consultar a un profesional de la salud para recibir orientación específica sobre la situación
- Evitar áreas donde la piel pueda estirarse significativamente durante el embarazo
- Asegurarse que el estudio cumpla con las normas higiene y esterilización
- Considerar posponer el tatuaje después del parto y la lactancia para minimizar los riesgos
TatoosSchool añade que tras el embarazo, algunas personas describen mayor sensibilidad en la piel y mayor dolor, por lo cual tatuaje puede resultar más doloroso si es realizado durante el embarazo. Cuando una persona tiene tatuajes, desde el inicio del embarazo puede usar aceites y cremas naturales para prevenir estrías. Si se opta por los tatuajes de henna, la persona también puede atravesar riesgos, por lo cual deberé informarse sobre el tipo de henna.