Escuchar el llanto de un bebé podría estar relacionado con la liberación de la oxitocina, una sustancia química que controla el aumento de leche materna. Una vez iniciado este proceso, después de 5 minutos, comienza a disminuir, permitiendo a las madres alimentar a los bebés hasta saciar su hambre o que empiecen el llanto de nuevo, así menciona un nuevo estudio realizado publicado en la revista Nature, reporta Infosalus.
“Estos resultados sugieren que el circuito cerebral provocado por el llanto no sólo es importante para el comportamiento de la lactancia, sino también para mantener la atención de la madre a lo largo del tiempo y fomentar el cuidado eficaz de sus crías incluso cuando está agotada”, menciona Robert Froemke, autor principal del estudio.
El estudio fue realizado por investigadores de la Facultad de Medicina Grossman de la Universidad de Nueva York en Estados Unidos. De acuerdo con Derechos de infancia y adolescencia en México, el 955.3% de los bebés de 0 a 1 años en México recibieron alguna vez lactancia materna hasta 2021. Este porcentaje fue ligeramente mayor en localidades rurales (96%) que en localidades urbanas (95%).
¿Qué es leche materna y su importancia?
La lactancia materna, informa Unicef, les proporciona a los bebés todos los nutrientes que necesitan para crecer y que su sistema inmunológico se desarrolle plenamente. Por ello, junto a la Organización Mundial de la Salud, recomiendan que la leche materna sea un elemento exclusivo de los bebés recién nacidos hasta los 6 meses edad y que hasta los 2 años se alimenten con una combinación de la misma con alimentos adecuados y nutritivos para su edad.
A pesar de su relevancia, la Organización Panamericana de la Salud destaca que alrededor del 55% de los bebés son amamantados dentro de la primera hora después de nacer en América Latina y el Caribe. El 65% de los países tiene menos de 14 semanas de licencia por maternidad y sólo el 35% de los países tiene 14 semanas o más de este permiso.
Otro factor que también incide en la lactancia materna, agrega National Geographic, son las condiciones médicas. Una cirugía mamaria puede incidir en la arquitectura de la glándula mamaria. A la par, algunas mujeres no desarrollan suficiente tejido mamario durante la pubertad. Los problemas de tiroides, la diabetes y el síndrome de ovario poliquístico también podrían incidir en los niveles hormonales.
¿Por qué el llanto de los bebés podría incidir en el aumento de la leche materna?
El equipo de investigación notó que cuando una cría de ratón empieza a llorar, la información sonora viaja hacia el núcleo intralaminar posterior del tálamo. Esta zona de la madre envía señales a las neuronas para liberan oxitocina en el hipotálamo. Aquí las señales se acumulan y superan a proteínas que actúan como guardianas de la leche materna.
“Estos hallazgos revelan cómo el llanto del lactante prepara el cerebro de la madre para amamantar. Sin esa preparación, puede producirse un retraso de varios minutos entre la succión y el flujo de la leche, lo que puede llevar a un bebé frustrado y a unos padres estresados”, subraya Habon Issa, coautor del estudio.
El equipo de investigación considera que conocer cómo funciona el sistema de la oxitocina en los seres humanos podría ofrecer nuevas formas de ayudar a personas que quieren amamantar, pero tienen dificultad para hacerlo. Aunque no se midió cuánta leche materna se obtenía, se conoció sobre la liberación hormona que la provoca.
(Con información de Infosalus, Derechos de infancia y adolescencia en México, Unicef, Organización Panamericana de la Salud, National Geographic)