Por su sonrisa, por su actitud, por su personalidad, por su buen comportamiento, por su inteligencia, por su desempeño en la escuela. Día con día podemos encontrar diversas razones por las cuales queremos darle todo a nuestro hijo, mimarlo y darle nuestro cariño. Aunque nunca está mal demostrar nuestro querer, consentirlo en exceso puede traer diversos problemas.
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Evitar mimar a un niño es un desafío que muchos padres enfrentan en la crianza. La tendencia a satisfacer todos los deseos de un niño puede surgir del amor y el deseo de brindarles felicidad. Sin embargo, un exceso de indulgencia puede llevar a problemas en el desarrollo emocional y social del niño, dificultando su capacidad para manejar la frustración.
Por ello, es fundamental encontrar un equilibrio entre el cariño y la disciplina. ¿Cómo evitar que mi niño sea mimado en exceso? ¿Cómo saber que estoy mimando mucho a mi hijo? Quédate en esta nota para conocer las respuestas y ayudar al desarrollo saludable de tu hijo.
¿Cómo tratar a un niño consentido?
De acuerdo con Lamentees maravillosa, ese deseo de que el hijo no pase por ciertos trabajos se volvió muy recurrente entre algunos padres. Idealizan la vida y la ponen en términos “tipo edén”. Eso es lo que quieren para sus hijos, un paraíso de colores, donde ellos puedan ir creciendo sin sobresaltos. Por eso construyen en su hogar una especie de “resort” con “todo incluido”.
EducaMundo explica que cuando se educa a los hijos, se tiene que proyectar hacia el futuro, ¿cómo queremos que se comporten en el futuro? Tal vez es preferible que comprendan y vivan un poco de las situaciones difíciles de pequeños y que aprendan con nuestra ayuda a manejar estas situaciones, a que sufran de adultos y carezcan de recursos. Por ello, Guía Infantil deja los siguientes consejos para mantener un equilibrio entre mimar a un niño y hacerlo en exceso:
- Con la educación a los niños hay que ser tolerante, pero hay que poner límites a sus actitudes y conductas cuando estas son inapropiadas
- Los bebés y los niños han de recibir cariños y mimos, sin embargo, un exceso de mimo es tan perjudicial como un exceso de autoridad con el niño
- Evitar la sobreprotección a los niños, los más pequeños han de poder evolucionar y experimentar y no crearles una burbuja a su alrededor
- El mando en la familia lo han de llevar los padres no el niño. La estructura en la familia es jerárquica
HacerFamilia informa que debes pensar que cada vez que le niegas a tu hijo un capricho superfluo, o una comodidad innecesaria le estás ayudando a forjar una personalidad, que le posibilitará su futura felicidad como persona adulta, libre y responsable. Las características que te ayudarán a saber si estás mimando en exceso a tu hijo son:
- Abandona el esfuerzo demasiado pronto
- Esquiva los pequeños trabajos domésticos que le corresponden
- Pierde la sonrisa ante el primer asomo de esfuerzo requerido
- La calidad de sus respuestas está dominada por el tono mediocre
- No le haces ver su parte de culpa ante las peleas con los amigos o los problemas en el colegio
- Existe una sobreprotección por miedo a que le hagan daño y sufra
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