Un matrimonio saludable se basa en ser un espacio seguro, donde las emociones y los conflictos se manejan de manera constructiva. No se trata de evitar problemas, sino de cómo una pareja enfrenta el estrés y las tensiones cotidianas. Sin embargo, el neuroticismo, es un rasgo de la personalidad que lleva al divorcio en pareja. Descubre por qué.
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¿Qué es el neuroticismo, rasgo de la personalidad que lleva al divorcio en pareja?
El psicólogo Mark Travers de Psychology Today, afirma que el neuroticismo es un rasgo de personalidad marcado por la inestabilidad emocional y alta reactividad que puede afectar profundamente la longevidad de una relación. Esto es porque las personas con altos niveles de neuroticismo tienden a interpretar los altibajos de la vida de manera negativa, lo que puede contribuir al final de un matrimonio.
El experto en salud mental, lo explica a través de dos escenarios:
Un sesgo negativo que intensifica el conflicto
Uno de los principales problemas que causa el neuroticismo en una relación es el sesgo negativo que afecta la interpretación de los eventos cotidianos. Las personas neuróticas suelen ver incluso las situaciones más neutrales a través de una perspectiva pesimista, lo que intensifica los conflictos que, de otro modo, podrían ser menores.
Un estudio publicado en 2020 en BMC Psychology encontró que las parejas con niveles elevados de neuroticismo experimentan una satisfacción marital significativamente más baja. Esto se debe a que las personas con esta característica tienden a enfocarse en las experiencias negativas, percibiendo incluso los gestos más inocentes de su pareja como amenazas o falta de consideración.
Por ejemplo, si un cónyuge olvida sacar la basura, la persona neurótica podría interpretar esto como una muestra de desdén o desprecio, lo que lleva a un conflicto desproporcionado. Este tipo de reacciones emocionales intensas y constantes desgasta la relación, transformando lo que debería ser un refugio seguro en un campo de minas emocionales.
A medida que la negatividad se acumula, el matrimonio se vuelve más tenso y menos satisfactorio, lo que puede llevar al divorcio.
La reactividad emocional y su impacto en la intimidad
La alta reactividad emocional también es una característica común en personas con neuroticismo. Esta reactividad se manifiesta en respuestas emocionales exageradas ante pequeñas frustraciones y una recuperación lenta después de un incidente negativo.
Según un estudio de 2022 publicado en Frontiers in Psychology, las personas con alta reactividad emocional tienen una menor "receptividad percibida" de su pareja, es decir, sienten que sus necesidades emocionales no son comprendidas o valoradas. Cuando uno de los cónyuges es altamente reactivo, la otra persona puede sentirse rechazada, incomprendida o incluso hostil. Esto deteriora la cercanía y la intimidad en la relación.
Los matrimonios exitosos se basan en la capacidad de ambas partes para satisfacer las necesidades emocionales del otro, manteniendo un espacio de apoyo mutuo. Sin embargo, si la reactividad emocional se convierte en una constante, la pareja puede empezar a evitar la cercanía física y emocional, lo que genera un ciclo de aislamiento y resentimiento.
Conciencia emocional
El neuroticismo puede erosionar la calidad emocional de un matrimonio, convirtiendo las discusiones cotidianas en eventos desgastantes que afectan la confianza y la seguridad. La clave para prevenir este deterioro radica en la conciencia emocional, la regulación de las respuestas impulsivas y el compromiso con la resolución de los conflictos de manera saludable.
En resumen, las parejas que logran manejar sus emociones y comprender las necesidades de cada uno tienen mayores probabilidades de superar los desafíos y fortalecer su vínculo.
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