¿Cuál es la importancia del tamiz auditivo neonatal? Las consecuencias de la sordera infantil son muchas y muy relevantes tanto en la dificultad que surge en los ñinos, en cuanto a su desarrollo académico como en su desarrollo social y emocional. Es decir, la sordera o hipoacusia, es una condición discapacitante que no solo dificulta comprender lo que se escucha, sino que también impide aprender a hablar, produce aislamiento social y graves problemas en el proceso de enseñanza/ aprendizaje.
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Desde finales de los años 90 se ha reconocido a nivel mundial que la detección de la sordera al nacimiento mejora drásticamente el pronóstico a largo plazo.
En este sentido, detectarlo a tiempo resulta crucial y para ello es importante realizar, en primera instancia, un tamiz auditivo neonatal a todos los bebés recién nacidos, de la mano de expertos técnicos. Y esto último es muy importante porque, en manos de personal no capacitado adecuadamente, se producen en ocasiones lo que llamamos “falsos positivos”.
Importancia del tamiz auditivo neonatal
En el congreso Iberoamericano de implante coclear realizado en Uruguay, el Instituto Mexicano de Otología y Neurotología (IMON), organización la cual dirijo, presentó una serie de 30 niños que habían sido enviados a dicha institución por haber reprobado el tamiz auditivo neonatal, de los cuales 14 (46%) resultaron finalmente haber sido falsos positivos.
Varios de ellos habían sido ya seleccionados para implante coclear en otros centros, o por lo menos para auxiliares auditivos, y en todos los casos los padres habían entendido que el diagnóstico era definitivo. Sin embargo, ninguno de ellos requirió auxiliares y actualmente, a 6 años de seguimiento en promedio, han desarrollado lenguaje de forma normal, sin requerir auxiliares auditivos.
Más que hablar de los detalles de nuestro protocolo de estudio, nuestra presentación se enfocó en explicar por qué esto no es estadísticamente sorprendente, y postuló que la tendencia a interpretar estudios de tamizaje como si fueran de diagnóstico es inquietante y refleja deficiencias en los procesos de capacitación del personal involucrado.
Esto no demerita en absoluto la existencia del programa de tamiz auditivo neonatal; de hecho, el Instituto Mexicano de Otología y Neurotología (IMON) insta a que se convierta en requerimiento legalmente establecido.
Un falso positivo se puede corregir, pero si la prueba no se hace, un niño que verdaderamente nace con pérdida auditiva pierde irremediablemente capacidades de lenguaje que después no se pueden recuperar.
En definitiva, los niños detectados y tratados antes de que cumplan de 3 a 6 meses de edad, logran evitar la discapacidad que provoca la sordera. Los niños que pierden la audición antes de aprender a hablar o que nacen con pérdida auditiva nunca adquieren el lenguaje hablado si no reciben el tratamiento adecuado a tiempo.
El tamiz auditivo neonatal es un estudio no invasivo, sencillo, rápido y de bajo costo. Requiere, simplemente, de la colocación de una oliva de medición por unos minutos en el conducto auditivo del bebé. Los beneficios en niños afectados son excelentes. Lo que hay que cuidar mucho es que la interpretación de los resultados sea la correcta.
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