¿Qué pasa si como un yogurt caducado?

Imagina esta escena: Eres fan del yogurt, tienes hambre, te diriges a buscar comida a tu refrigerador y te das cuenta que la fecha de consumo preferente ya pasó. Piensas que tal vez debes tirarlo, pero tu antojo te dice que tal vez no pasa nada si comes un poco … ¿Tú qué harías? ¿Te lo comerías? 

Cuando te enfrentes a esta situación con tus alimentos, o tu yogurt en el refrigerador, hay dos conceptos claves que debes comprender, la fecha de caducidad y fecha de consumo preferente.

De acuerdo con la NOM-051-SCFI/SSA1- 2010 Especificaciones generales de etiquetado para alimentos y bebidas no alcohólicas preenvasados-Información comercial y sanitaria, es requisito colocar en la etiqueta de los alimentos y bebidas la fecha de caducidad o de consumo preferente, la cual no debe alterarse bajo ninguna circunstancia. 

Esta NOM establece:

• Fecha de caducidad. Fecha límite en que se considera que las características sanitarias y de calidad que debe reunir para su consumo un producto preenvasado, almacenado en las condiciones sugeridas por el responsable del producto, se reducen o eliminan, de tal manera que después de esta fecha no debe comercializarse ni consumirse.
• Fecha de consumo preferente. Fecha en que, bajo determinadas condiciones de almacenamiento, expira el periodo durante el cual el producto preenvasado es comercializable y mantiene las cualidades específicas que se le atribuyen tácita o explícitamente, pero después de la cual el producto preenvasado puede ser consumido.

¿Qué pasa si como un yogurt caducado?

Esto quiere decir que cuando un producto ya caducó no se puede ingerir por ningún motivo porque supondría un riesgo para nuestra salud, y por lo general es un concepto que se utiliza más en carnes y pescados. 

Mientras que en el caso del yogurt, generalmente no lleva fecha de caducidad, sino la leyenda “consumir antes de” o “consumo preferente”. Esto quiere decir que después de la fecha indicada en su envase, podría sufrir modificaciones en sus propiedades organolépticas: sabor, aroma, aspecto o temperatura. Pero no sería riesgoso para la salud.

Según la Academia Española de Nutrición y Dietética, si el yogurt estuvo bien conservado y refrigerado, podría durar entre dos y tres semanas después de la fecha indicada. Y tomar en cuenta que si tiene ingredientes adicionales, como frutas o frutos secos, el tiempo en que se podría comer también disminuye considerablemente.

En resumen, es seguro comerse un yogurt después de la fecha de consumo preferente, aunque podría no tener la misma calidad. Sin embargo, lo ideal es siempre respetar las fechas preestablecidas en los envases de los productos. 

Mientras que algunas señales definitivas para no comernos el yogurt serían: que su tapa este parcialmente dañada o con humedad, pues es un riesgo de intoxicación; que su consistencia sea diferente, por ejemplo más líquida de lo habitual, o si percibimos un sabor más ácido o agrio.