Los riñones tienen la función de eliminar los desechos y el exceso de líquido del cuerpo, también eliminan el ácido que producen las células del cuerpo y mantienen el equilibrio saludable de agua, sales y minerales en la sangre, pero ¿qué les ocurre cuando tomamos refresco diario? Estas son las consecuencias.
Los Institutos Nacionales de Salud en Estados Unidos señalan que el buen funcionamiento de los riñones es fundamental para la salud, pues sin ellos, los nervios, músculos y otros tejidos del cuerpo no funcionan normalmente. Además, los riñones son clave para el control de la presión arterial, la producción de glóbulos rojos y unos huesos fuertes.
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Cada uno de los riñones está formado por miles de unidades de filtración llamadas nefronas, que filtran la sangre y eliminan los desechos por medio de la orina. Cuando se padece una enfermedad renal crónica, las nefronas se dañan y se deteriora la función de los órganos.
Para prevenir enfermedades de los riñones es necesario controlar problemas de salud como la diabetes e hipertensión, hacer ejercicio, tener un peso saludable y limitar el consumo de alcohol y bebidas carbonatadas como el refresco.
¿Qué pasa en los riñones al tomar refresco diario?
Los refrescos son bebidas gaseosas que afectan el buen funcionamiento de los riñones, pues contienen altos niveles de azúcar y sodio, que son una amenaza para la salud renal y general de nuestro cuerpo.
Tomar refresco todos los días, así como bebidas alcohólicas y energizantes puede favorecer el desarrollo de cálculos renales, que según Mayo Clinic son depósitos duros hechos de minerales y sales que se forman dentro de los riñones.
Los cálculos se forman cuando la orina se concentra, lo que permite que los minerales se cristalicen y se unan, detalla la mencionada entidad de salud. Cuando no se detectan a tiempo, pueden causar daños permanentes.
Generalmente, los cálculos renales no causan síntomas hasta que empiezan a desplazarse por el riñón o pasan a los conductos que conectan a este órgano con la vejiga. Cuando eso pasa, se pueden presentar molestias como:
- Dolor punzante e intenso en los costados y la espalda
- Dolor que se propaga hacia la parte baja del abdomen o incluso la ingle
- Dolor que viene en oleadas, es decir, que tiene una intensidad fluctuante
- Sensación de ardor al orinar
- Orina color rosa, rojo o marrón, con olor desagradable
- Necesidad constante de orinar
- Náuseas y vómitos
- Fiebre y escalofríos en caso de infección
La doctora Agualuz Hernández, jefa del Servicio de Nefrología y Trasplante Renal del Hospital General de Enfermedades del Seguro Social de Guatemala, advierte para la revista Semana que “las bebidas carbonatadas y energizantes afectan directamente a los riñones, ocasionando cálculos e insuficiencia renal de una forma progresiva y silenciosa”.
¿Cómo mantener los riñones saludables?
La recomendación es reducir tanto como se pueda el consumo de refrescos y otras bebidas azucaradas y priorizar el consumo de agua natural. Mayo Clinic sugiere beber entre 2 y 3 litros de agua al día para mantener la orina diluida y prevenir la formación de cálculos.
“Bebe suficiente líquido, idealmente agua, para que la orina sea transparente o casi transparente”, mencionan.
Recuerda que los refrescos también aumentan el riesgo de otras enfermedades, como la obesidad, diabetes tipo 2, hipertensión y algunos tipos de cáncer, porque contienen altas cantidades de azúcares y colorantes.
De acuerdo a datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) México se ubica como uno de los países de mayor ingesta de bebidas azucaradas por persona, con 163 litros al año. Por su parte, un estudio del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) y publicado en el International Journal of Obesity indica que el 19% de las muertes en el país son atribuibles al consumo de bebidas azucaradas.
¿Qué esperas para dejar el refresco? Tus riñones y todo tu organismo te lo agradecerán.
(Con información de NIH, Mayo Clinic, MedlinePlus, Alianza por la Salud Alimentaria)