Una buena alimentación puede prevenir factores de riesgo de cáncer de mama

En México, el cáncer de mama es la principal causa de muerte de mujeres mayores de 25 años, falleciendo una mujer cada 2 horas. Se estima que una de cada 12 desarrollará esta enfermedad en algún momento de su vida, informa el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Pese a que existe información y campañas que promueven la prevención del cáncer de mama, aún son ineficientes, pues aún no son capaces de transmitir toda la información necesaria para tener una verdadera cultura de prevención.

Al respecto, la nutrióloga Saraí López Rivera señaló dentro del Ciclo de Conferencias por el Mes Rosa del Clúster de la Industria Automotriz de Coahuila A.C. cómo tener una alimentación equilibrada puede ayudar a prevenir factores de riesgo para desarrollar cáncer de mama como el sobrepeso y la obesidad, indica la Vanguardia.mx.

Combatir las probabilidades de cáncer a través de la alimentación

En México, el cáncer es la tercera causa de muerte. Entre los más comunes se encuentran el de próstata, pulmón, estómago, colorrectal y mama, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Estas afecciones están acompañadas por otras que se convierten en factores de riesgo, como es el caso de la obesidad.

Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut), más del 75% de la población tiene sobrepeso u obesidad; es decir, 7 de cada 10 personas la padecen. Según la investigadora Luz María Adriana Balderas Peña en entrevista con Ecancer, la acumulación de grasa es un factor de riesgo incluso en mujeres delgadas, pues aumenta los niveles de estrógeno, hormona elevada en los casos de cáncer de mama.

Promover una buena alimentación y actividad física, puede ayudar a disminuir el sobrepeso y obesidad, reduciendo así un factor de riesgo considerable de cáncer de mama. El Plato del Buen Comer es una gran útil para combinar los alimentos, en especial si la persona no tiene acceso a un nutriólogo.

Prevenir es clave

La nutrióloga Saraí López Rivera señala que muchas personas piensan que el cáncer de mama solo es común en personas mayores de 50-60 años o que ya pasaron la menopausia. Sin embargo, en los últimos años se ha visto que surge desde edades tempranas.

Es a partir de los 20 años que se recomienda hacer autoexploraciones; después de los 25, acudir a exploraciones clínicas y tras los 40, realizarse una mamografía cada dos años.

“Ya hay mucha información y realmente no lo hacemos”, enfatizó, “no acudimos al médico como tenemos que, aunque escuchemos, y nosotras solas tampoco nos hacemos una autoexploración. Ni siquiera sabemos cómo hacerla”, detalla a la Vangiuardia.mx

(Con información de IMSS, Vanguardia, INEGI,