Hablar con uno mismo puede parecer algo loco, pero es algo natural y que todos hacemos, ya que siempre estamos teniendo diálogos internos que nos permiten pensar de mejor manera, a continuación, te decimos por qué esta práctica es importante.
Hablarnos a nosotros mismos puede ser terapéutico, ya que al final de cuentas todos vivimos con nosotros mismos, y comunicarnos con nuestro ser puede ser vital y emocionalmente necesario para escucharnos.
Te podría interesar
¿Por qué es importante hablar con nosotros mismos?
El profesor Ethan Kross, realizó una serie de experimentos en la Universidad de Michigan donde concluyó que las personas que hablaban consigo mismas y que empezaban diálogos pronunciando su nombre tenían más éxito en sus vidas, mostraban mayor seguridad personal se percibían como más felices.
Aunque a simple vista puede parecer muy ingenuo. Hablar con uno mismo hace que el cerebro funcione mucho mejor, su capacidad de percepción es más hábil y además gestionamos de forma adecuada nuestro mundo emocional. Por lo tanto, el diálogo interno tiene un claro beneficio avalado por la ciencia, y son diversos los estudios que lo muestran.
Hablar con uno mismo puede hacernos más inteligentes
Hablar con uno mismo no nos hará más inteligentes por arte de magia, lo que sucederá es que mejoraremos nuestra capacidad intelectual, es decir, potenciaremos nuestra atención, nuestra capacidad de reflexión, tomaremos mejores decisiones nuestra concentración estará más focalizada y controlaremos las distracciones.
Mejora la autoestima
Cada uno de nosotros vive en un entorno determinado y con una serie de personas con las que nos llevamos mejor o peor. Sin embargo, más allá de ese contexto, con quien realmente compartimos la vida es con nosotros mismos.
Hablar con nosotros mismos nos permite centrarnos en el momento presente de las emociones para tomar conciencia de ellas, entenderlas y gestionarlas.
El diálogo interno es también una poderosa fuente de motivación, la más sincera, la más confiable y a la que no debemos fallar, ya que hacerlo es fallarnos a nosotros mismos.
Una publicación del ‘Quarterly Journal of Experimental Psychology’ señala que al hablar en voz alta activamos un “interruptor” en la corteza cerebral, donde se asienta la conciencia del “yo”. De este modo, desarrollamos un mejor control psicológico para pensar con mayor claridad y de forma más eficiente.
Ahora que ya conoces los beneficios que tiene el hablar contigo mismo, no los tomes a la ligera y ponte a platicar contigo, escuchate y verás cómo mejora tu mente.
(Con información de: La Mente es Maravillosa y Mejor con Salud)