Apoyo, compañía, cariño, diversión, confianza, seguridad, estabilidad, esperanza, escucha, tranquilidad son algunos elementos que ofrece una amistad. Estas relaciones suelen formarse durante los años escolares, formando parte del desarrollo saludable de una persona. Por ello, cuando existen amistades poco reales o existe un rechazo de las personas, existen riesgos al bienestar. Desde evitar realizar actividades que fomenten el aprendizaje hasta dejar el estudio.
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El rechazo escolar puede darse en la infancia o adolescencia. Aunque el rechazo pareciera sólo llevar a la exclusión, puede desencadenar una serie de violencias verbales, emocionales y físicas en las relaciones. ¿Qué es el rechazo escolar? ¿Qué hacer frente al rechazo escolar? Conoce las respuestas para actuar frente a estas acciones que repercuten en la salud física y mental.
Si vives rechazo escolar, coméntalo con alguna persona de confianza para encontrar solución al problema. Evita que el miedo o la vergüenza impidan contar tu historia. Si conoces a alguien que vive rechazo escolar, ofrécele tu apoyo para buscar ayuda profesional con el fin de evitar estragos al futuro. Identificar el rechazo escolar es una opción para crear ambientes seguros y empáticos.
¿Cómo afecta el rechazo escolar?
De acuerdo con Centro Londres 94, el rechazo escolar es la dificultad para asistir a la escuela asociado con la angustia emocional, especialmente ansiedad y depresión. El rechazo escolar incluye a infantes, adolescentes y jóvenes que se ausentan de la escuela después de tener problemas de comportamiento que desencadenar una ansiedad. El rechazo escolar puede llevar a un bajo rendimientos escolar, dificultades familiares y problemas de relación.
Según el Consejo General de Psicología de España, el rechazo escolar suele presentarse en la adolescencia donde los alumnos se dividen en alumnos populares y alumnos ignorados. Los primeros suelen no presentan problemas de comportamiento en el aula, mientras los otros no reciben atención por parte de sus compañeros, presentando problemas de autoestima y soledad. Dicho rechazo puede llevar a una ansiedad escolar.
CEUPE Magazine explica que la ansiedad escolar es la ansiedad y el estrés experimentado por las y los estudiantes en el entorno educativo. La ansiedad escolar puede ser desencadenada por una variedad de factores, como la presión de obtener buenas calificaciones, el temor de las evaluaciones, conflictos con compañeros, dificultades académicas o problemas familiares. Aunque la ansiedad es normal, un exceso puede ser abrumador e inferir en el bienestar académico.
Psicología y Mente detalla que en la adolescencia, las y los jóvenes dan demasiada importancia a la aceptación o admiración de las personas. Sentir que fracasan en ello no sólo resulta frustrante, también puede generarles la idea de que son perdedores o personas pocas deseadas. El sentimiento puede acrecentarse si el rechazo no sólo proviene de la escuela, también de su propia familia. Para afrontar el rechazo, Nemours TeensHealth recomienda:
- Ser sincero: reconocer el sentimiento y no fingir que no hay dolor. Pensar en cómo se siente ese rechazo
- Percibir la intensidad de tus sentimientos: ¿es poco o mucho el nivel de afección? Pon un nivel y nombra tus emociones. Después cuéntalo con personas para comprender tus sentimientos e impulsarte a ponerlos en palabras. Esto te ayudará a mejorar tus relaciones
- Sé positivo: evitar obsesionarnos con el rechazo. Quedarse anclado a la idea puede generar más rechazo
- Evitar perder la perspectiva: pensar en las cosas que realizas bien y en tus cualidades. Reconoce el trabajo incluso de intentar las cosas
- Saca provecho del rechazo: es una oportunidad para trabajar en las metas y habilidades que podrían afectar a formar relaciones
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