¿Por qué NO me gusta convivir con mi familia, según la psicología?

Fin de año no siempre es paz y alegría, hay casos en los que pasar tiempo con la familia se vuelve un desafío o un momento doloroso que muchos prefieren evitar, así que si te preguntas ¿Por qué NO me gusta convivir con mi familia? La psicología tiene algunas respuestas que seguro te harán mucho sentido.

La familia debería ser una fuente de apoyo incondicional que nos haga sentir amados, aceptados y acompañados, desafortunadamente, esto no siempre es así pues cuando vivimos con una familia tóxica, pueden tratarnos de manera injusta, sin el mínimo interés por entender nuestras necesidades. 

Poco a poco, comenzamos a alejarnos y pasar tiempo con la familia se vuelve una verdadera tortura, lo que empeora con los sentimientos de culpa que vienen por no querer convivir con ellos. 

Razones por las que no te gusta convivir con tu familia

Hay muchos comportamientos que puede tener tu familia hacia ti y que harán que te alejes de ellos, entre los que destacan: 

• Comparaciones, debido a que esperan que cumplas con estándares poco realistas o de otras personas cercanas. 
• Manipulación emocional, especialmente para hacerte creer que tú estás mal siempre. 
• Chantajes que buscan controlarte para que hagas lo que ellos consideran que está bien para ti, aunque no seas feliz. 
• Victimismo, para hacerte creer que con tus acciones les causas un daño o que eres muy egoísta por pensar solo en ti. 
• Invalidación de tus emociones o acciones, con comentarios como que eres muy exagerado, que no aguantas nada o que eres de la generación de cristal. 
• Insultos, sobre tu cuerpo, tu forma de vestir, lo que te gusta hacer o tu pareja. 
• Indirectas que buscan lastimarte, son comentarios que quieren verse como bien intencionados pero que en realidad te criitcan, juzgan o se burlan. 
• Falta de apoyo en tus decisiones, tu forma de vivir, lo que haces o a quien decides amar. 
• Burlas de tu físico, de lo que dices o lo piensas, además de ponerte apodos poco respetuosos.  
• Violencia física 

Siempre nos han dicho que la familia va ante todo y que, por ello, debemos soportar todo lo que nos hagan o digan, lo que genera mucha culpa o la sensación de que tenemos un problema cuando simplemente no soportamos pasar tiempo con ellos porque nos generan ansiedad, importancia, frustración y desesperación.

Poner límites en esta situación no es fácil, pero es muy importante para sentirnos en paz y asimilar las sensaciones que podemos experimentar y que no serán agradables. 

¿Qué hacer cuando no soporto a mi familia? 

El portal especializado Psicología y Mente menciona que, para afrontar esta situación, es fundamental primero evaluarnos a nosotros mismos, ver por qué tenemos estos sentimientos hacia nuestros familiares y lo que podemos hacer para cambiarlo o sobrellevarlo de mejor manera. 

Estos consejos pueden ayudarte a lidiar con una familia tóxica: 

• Reconoce lo que sientes, ya que cuanto antes lo aceptes, podrás trabajarlo para superarlo. 
• Analiza tus expectativas, muchas veces esperamos algo de nuestra familia que no es posible y nos olvidamos de que ellos también tienen necesidades y que requieren de comprensión en algunas situaciones. 
• No guardes rencores, es difícil, pero es importante trabajar en las situaciones familiares que nos lastimaron en la infancia o en algún momento de nuestro pasado, ya que eso podría generarnos frustraciones.
• Trabaja tu asertividad, especialmente para poder poner límites sin que tu familia te chantajee. Por ejemplo, si solías decirle que sí a todo a tus padres y ahora empiezas a decir que no, debes prepararte para que se enojen, intenten manipularte o hacerte sentir culpable, aunque no hagas algo malo.
• Practica el desapego, pues según Healthline, es importante no dejar que la familia te involucre en los problemas que no te interesan. Recuerda que no tienes que involucrarte en nada que preferirías evitar.
• Decide lo que prefieres mantener en privado, no tienes que compartir todo con tu familia, especialmente si tienen tendencia a criticarte, burlarse de ti o manipularte. Está bien guardar cosas para ti o para las personas que sí te respetan. 
• Analiza lo que no te gusta de ti, muchas veces el rechazo a nuestra familia puede ser el reflejo de algo que detestamos sobre nuestra personalidad pero que no podemos reconocer.
• No generalices, seguramente hay algunos miembros de tu familia que no te hacen sentir bien, pero hay otros que sí te dan la comprensión y el apoyo que necesitas, así que es importante hacer esa diferencia.
• No esperes que cambien, ya que los familiares tóxicos rara vez se dan cuenta de que nos lastiman y mucho menos harán algo para trabajarlo. La lave está en ti, en fortalecer tu autoestima, empezar a decir "no" y alejarte cuando lo necesites.
• Busca apoyo psicológico, especialmente si por más que intentas mejorar la convivencia con tu familia, solo encuentras tu salud mental más y más deteriorada. Un profesional puede ayudarte a poner límites y ofrecerte soluciones específicas. 

Si a pesar de aplicar estos consejos sigues sintiéndote mal cada vez que estás con tu familia, lo mejor es poner distancia y evitar pasar tiempo con ellos. Es mentira que tenemos que tolerar todo simplemente porque son familia, nuestro bienestar y salud emocional son lo más importante. 

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