Los alimentos que consumimos todos los días impactan nuestro cuerpo, pero también nuestro cerebro. Distintos estudios de la Universidad de Harvard han identificado ciertos alimentos que pueden acelerar el deterioro de la memoria y otras funciones cognitivas si se consumen con regularidad.
Foto: Canva
Además de afectar nuestra capacidad de recordar y procesar información, estos alimentos también pueden aumentar el riesgo de desarrollar demencia y otros trastornos neurológicos. La doctora Lisa Mosconi, neurocientífica de la Facultad de Medicina de Harvard y autora de ‘Brain Food: The Surprising Science of Eating for Cognitive Power’, destaca que existen alimentos de los que es mejor alejarse en la medida de lo posible.
Te podría interesar
En entrevista con el portal de la clínica especializada Gennev, Mosconi señala que hay comidas proinflamatorias que causan inflamación en el cuerpo y el cerebro: “Hay evidencia de que algunos ingredientes en estas comidas son especialmente dañinos para el cerebro, como las grasas saturadas trans, y las grasas saturadas en exceso. El cobre, por alguna razón, también es un gran problema”.
Los alimentos que dañan el cerebro
1. Alimentos ultraprocesados
Los alimentos ultraprocesados como el pan industrial, las pizzas congeladas y los snacks empacados contienen altos niveles de grasas trans, azúcares añadidos y aditivos químicos que afectan la salud cerebral. Según la doctora Mosconi, además de que estos productos carecen de los nutrientes esenciales que el cerebro necesita, también pueden contribuir al deterioro cognitivo y aumentar el riesgo de accidentes cerebrovasculares.
2. Azúcares artificiales
Los azúcares propios de los alimentos naturales, como frutas y cereales integrales, no son un problema. Sin embargo, los azúcares añadidos en refrescos, postres industriales y jugos procesados pueden tener un impacto negativo en las funciones cognitivas.
3. Alimentos fritos
La doctora Mosconi advierte que el consumo excesivo de alimentos fritos en aceites de baja calidad puede contribuir a la neuroinflamación, afectar la memoria y aumentar el riesgo de trastornos como la ansiedad y la depresión.
4. Alcohol
El alcohol es ampliamente conocido por sus efectos negativos en la memoria y la función cognitiva. La doctora Mosconi enfatiza que el consumo excesivo de alcohol es uno de los principales factores de riesgo para el deterioro cerebral, por lo que recomienda evitarlo o, al menos, reducir su consumo al mínimo.
5. Exceso de productos de origen animal
Según la doctora Mosconi, reducir la cantidad de productos animales en la dieta puede beneficiar la salud del cerebro. Alimentos ricos en grasas saturadas y ciertos metales, como el cobre, pueden contribuir a la inflamación cerebral y aumentar el riesgo de enfermedades neurodegenerativas.
Foto: Canva
La relación entre la alimentación y la salud cerebral es innegable. Una dieta en productos naturales, en la que evitemos el consumo de productos ultraprocesados, fritos y altos en grasas saturadas puede marcar una gran diferencia en la protección de nuestras funciones cognitivas a largo plazo.
Para enterarte de toda la información que necesitas sobre salud y bienestar síguenos en Facebook y TikTok.