Patrick Devlyn, presidente de la Comisión de Salud del Consejo de Coordinador Empresarial, refrendó el compromiso del sector privado con las asociaciones de pacientes, que se ven afectadas con la cancelación de las Normas Oficiales Mexicanas.
En su participación en el foro “Las NOM’s y la ruta de la regulación en el sector salud”, organizado por SuMédico, en alianza con El Universal y la Academia Nacional de Medicina, el también consejero accionista y delegado de Grupo Devlyn, reiteró la importancia de colocar al paciente al centro de centro del Sistema Nacional de Salud.
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“El paciente debe estar al centro del Sistema Nacional de Salud. Al inicio de esta administración, con deseos genuinos de mejorar el sistema de salud, nunca se dio el tiempo para que el sistema lo asimilara”, apuntó Devlyn.
De acuerdo con el presidente del Patronato del Hospital Juárez de México, la inestabilidad del sistema de salud de México ha tenido efectos directos y graves en los mecanismos de distribución de medicamentos y, por ello, es relevante que en este momento se acentué la mirada en un tema tan relevante como lo son las NOM’s.
“Es una obligación abrir un espacio y preocuparse genuinamente de todas las autoridades que dependen de esas normas. Desde el Consejo Coordinador Empresarial nos congratulamos en este espacio, queremos reconocer a los liderazgos de la Academia Nacional de Medicina por abrirse a esta conversación”.
El primero de junio de 2023, tras la publicación del Programa Nacional de Infraestructura de la Calidad 2023, en el Diario Oficial de la Federación, el Gobierno Federal dio a conocer el listado de “normas vigentes a ser canceladas”. El documento apunta que son “65 a cancelar en el presente año”, 35 de estas en materia de Salud Pública.
Devlyn recordó que tras la medida implementada por el Gobierno Federal, Francisco Cervantes, presidente del CCE, se pronunció en contra de su cancelación.
Asimismo, destacó la importancia de reconocer a la salud como un derecho humano.
“Cuando estamos hablando de salud, estamos hablando de las vidas de las personas, siendo esto un derecho humano en un país donde tenemos un sistema de salud público. Debemos, por ende, beneficiar su sistema de bienestar (…) Tenemos el compromiso con la sociedad, con las personas, con las instituciones, porque la salud es un buen negocio porque mejora la calidad de vida de las personas”.